El fútbol de todos
En Italia debuta un jugador de 30 años que con 14 quedó paralizado por una enfermedad, e Icardi anuncia sus memorias con 23 años.
«Hoy debes hacer dos goles», le confió su técnico antes de saltar al césped este pasado fin de semana. Y Bakery Jatta, disciplinado, saltó e hizo lo que le habían sugerido. Jatta era un perfecto desconocido en el fútbol alemán y europeo hasta hace apenas seis meses. Fue cuando el histórico club Hamburgo le invitó a una rutinaria, y podríamos decir que piadosa, prueba de dos días allá por invierno y el proyecto de jugador que era este joven gambiano convenció al técnico Bruno Labbadia, que decidió prorrogar su estancia con los ‘dinosaurios’. Con solo 17 años, sin una trayectoria futbolística anterior, la sorpresa saltó cuando se supo que se trataba de un refugiado, huérfano, huido de su país hasta acabar en Bremen, donde fue acogido en un proyecto de integración de jóvenes. Un apoyo que incluyó estudios pero también la práctuca deportiva, como el fútbol. El Werder Bremen se fijó en él, le hizo una prueba, pero no un contrato, y unos cuantos hilos dieron con Jatta en el Hamburgo, donde espera ahora su turno en el filial, a la espera de otra nueva oportunidad, la que ha encontrado a 6.000 kilómetros de su hogar.
El Hamburgo salió vapuleado el domingo en su propio feudo, 0-4 ante el recién ascendido y club más odiado de Alemania, el Red Bull Leipzig, el mismo que derrotó al Dortmund la semana anterior y ya es tercero –a la espera de la jornada intersemanal– solo por detrás del Hertha de Berlín y el arrollador Bayern, que se vieron las caras anoche. Por cierto, los bávaros preparan una megaoferta para atar a Robert Lewandowski hasta 2021 y teniendo en cuenta que quien más cobra en la plantilla es Thomas Müller, 15 millones al año...
El RBLeipzig del Este alemán, donde no había un solo proyecto que plantara cara al hegemónico Oeste, es el enemigo a batir por cada una de las aficiones rivales, por representar la mercantilización de un deporte que en Alemania sigue estando en gran medida en manos de los aficionados: por ley, el 51% del derecho de decisión de los clubes de Primera y Segunda pertenece a los socios, con únicamente dos excepciones históricas: Bayer Leverkusen y Wolfsburgo.
Puerto de desembarco de la firma del ‘Toro Rojo’ en el mercado germano, eligió Leipzig, sede del primer campeón alemán en 1903, tras no poder concretar operaciones similares en otros lugares. Se hizo con la licencia de una modesta entidad en la quinta división, compró varios filiales, adquirió los derechos del estadio de la ciudad –ahora Red Bull Arena– hasta 2040 y en cuestión de siete años se ha plantado en la mismísima Bundesliga. Por el camino, un interminable rosario de protestas de aficiones, denuncias de otros clubes por llevarse a sus canteranos, etc, etc...
“Nein zu RB” (No al RB) es la campaña a la que se han sumado todos los seguidores del resto de equipos, contra la idea del fútbol como negocio y sin escrúpulos que representa el Leipzig. Su dueño se ha marcado 2024 como horizonte para levantar la ensaladera, sobre todo tras invertir más de 50 millones en fichajes desde 2014 –8 de los diez más caros en la historia de la Segunda alemana–. Eso sí, nada de figuras rutilantes, sino incipientes promesas en una plantilla con 23 años de media.
Liverpool «matagigantes»
Habrá que ver hasta dónde le alcanza al millonario proyecto en este debut en la máxima categoría, donde Werder Bremen y Schalke 04 no han puntuado, el Dortmund empieza a carburar –6-0 y 1-5 sus últimos partitos–, el Gladbach también lleva paso firme liderado por Thorgan Hazard, hermano pequeño de Eden, el del Chelsea, y el defensa español del Mainz José Rodríguez, que debutaba, ha sido castigado con cinco partidos de sanción y una multa de 10.000 euros por una durísima entrada a un rival, que le dejará entre 4 y 6 semanas en el dique seco. No es el único castigo severo de esta jornada: Aron Johannsson, del Bremen, ha sido suspendido por dos partidos, más multa de 8.000 euros, por llamar al colegiado «puto árbitro».
El que ha castigado al argentino Maxi López –aquel rubio delantero que pasó por el Barça– sin jugar en el Torino es su técnico serbio, Sinisa Mihajlovic. ¿Bajo qué argumento? «Este no es el Maxi López que yo conocí y que entrené en el Catania y en la Sampdoria. Le hemos puesto una dieta y ya sabe que tiene que adelgazar un kilo por semana. Pesa siete kilos de más, casi una lavadora». Nada que ver con la historia de Fabio Pisacane.
A sus 30 años, debutó este fin de semana en Serie A, lo hizo con el ascendido Cagliari, y en el Calcio todo el mundo se acordó de los orígenes de este jugador, al que con apenas 14 años le detectaron el síndrome de Guillaín-Barre, que le dejó paralizado de pies a cabeza. Desahuciado por la medicina, comenzó una tenaz recuperación, se levantó, volvió al fútbol, ascendió a la serie B en 2012 con el Ternara, el Cagliari se fijó en él, lo fichó, ascendieron y el jugador ha debutado en la máxima categoría sin poder olvidar su adolescencia.
Pero la noticia en la Serie A, más allá del primer punto del modesto calabrés Crotone, fue la derrota de la Juventus en su visita a San Siro, donde no perdían desde 2010 ante unos nerazurri entrenados entonces por José Mourinho. El Inter de Frank de Boer venía de desangrarse en Europa League, 0-2 en casa ante un rival israelí, y acabó ganando a los juventinos 2-1, comandados por un gol y una asistencia del argentino Mauro Icardi, que a sus apenas 23 años presenta en octubre un libro de memorias donde no escatima referencias a sus desaveniencias con su compatriota Maxi López –el que ha engordado tanto como una lavadora– tras liarse con su hasta entonces mujer.
Pero si la derrota de la Vecchia Signora sorprendió, otro tanto se puede decir de la tercera consecutiva del Manchester United de José Mourinho. Su verdugo fue el Watford –no perdían ante ellos desde 1986–, 3-1, y el técnico luso cargó contra el árbitro. Los Red Devils no terminan de encontrar el camino y en ese interín, sus vecinos del City llevan velocidad de crucero. 4-0 al Bournemouth, elogios por doquier a Pep Guardiola, a su estrella Kevin de Bruyne, pero de momento han jugado contra los cuatro últimos clasificados. Veremos qué sucede cuando se mida como el Liverpool con los ‘cocos’, ante los que los Reds de Jurgen Klopp suelen dar su mejor medida: 10 puntos de 12 posibles ante Arsenal, Tottenham, Leicester y, ahora, Chelsea. Esta jornada en su visita a Stamford Brigde –el duelo más repetido en este siglo XX– dieron un golpe en la mesa y ganaron 1-2.
City, Everton –hacía diez años que no firmaban un arranque igual– y Tottenham –lesión de su goleador Harry Kane– son los únicos invictos, Leicester vuelve a sonreir gracias a los dos goles de su fichaje el argelino Islam Slimani y el nombre del día fue el de Gareth Barry y su partido 600 en la Premier. Solo Lampard (609) y Giggs (632) han alcanzado esa cifra. United-Leicester y Arsenal-Chelsea, aperitivo en Inglaterra esta jornada.
En la liga serbia vivieron su plato fuerte entre el Partizan y el Estrella Roja, el Večiti Derbi o ‘derbi eterno’ de Belgrado, desaveniencias políticas, sociales y culturales de por medio, la ancestral lucha entre los ministerios de Interior y Defensa de mediados del siglo pasado, como en los clásicos Steaua-Dinamo de Bucarest o Levski-CSKA en Sofía. Esta vez la victoria fue para los grobari o sepultureros, lo que propició que el Estrella cediera el liderato a la Vojvodina. No lo ha recuperado aún el PSG en la Ligue 1, y sí un Feyenoord que marcha aventajado en la Eredivisie y ya sueña con un título que no gana desde 1999. Pelea por él en Suecia el AIK Solna, que tuvo una emotiva iniciativa, como fue hacer que los jugadores saltaran al campo acompañados en lugar de por niños por los socios más antiguos. Porque el fútbol también es de ellos. Como de los Jatta o Pisacane y no solo de los Ibrahimovic, Balotelli o Pogba. El problema es que como diría la actriz Monica Belluci, «la belleza te hace interesante solo durante cinco minutos». Los que todos tenemos de gloria en la vida...