Rementeria se enfrenta a su gestión en Gernika

Mañana, en la Casa de Juntas de Gernika, el Diputado General de Bizkaia, Unai Rementeria, afronta el debate anual de política general que se convierte en esta ocasión en una buena oportunidad para examinar el primer año del Gobierno foral PNV-PSE. Repaso pero también momento de proponer proyectos con hitos en la política fiscal, la creación de empleo, así como en profundizar en el cohesión social y territorial.

Son algunos de los capítulos en los que el de Mundaka abundará en su discurso ante la Cámara. Lo cierto es que nadie duda de la importancia de esas cuestiones pero también que, de una vez por todas, los gestores del PNV y sus socios del PSE respondan a cuestiones que han podido escuchar a diario a las puertas del palacio foral. Son las que tienen que ver con la subcontratación de servicios, santo y seña de la política jeltzale.

Tres claros ejemplos son las residencias, la planta de Tratamiento Mecánico Biológico (TMB) de Artigas y los educadores del Museo Guggenheim, donde la denuncia de la precariedad que soportan los trabajadores se repite día sí, día también. El silencio no puede ser el modo de afrontar esos conflictos, especialmente en el de los geriátricos, donde los usuarios también soportan una gestión en la que prima la cuenta de resultados a otros. No me extrañaría que, valiéndose del manual trasladado desde Sabin Etxea, Unai Rementeria acuse a los sindicatos de utilizar a los trabajadores contra el Ejecutivo foral. Es tiempo de ser audaz y resolver los problemas, no enconarlos y criminalizar reivindicaciones legítimas.