GERNIKA KESB 57

IDK GIPUZKOA 62

 

Por culpa de las lesiones de Iulene Olabarria y Gabriela Ocete, aparte de la baja de larga duración de María Erauntzetamurgil, IDK Gipuzkoa acudía al polideportivo Maloste de Gernika con siete jugadoras, de las cuales jugaron seis. Sara Iparragirre fue el único recambio que empleó Azu Muguruza para sustituir a Toch sarr y Onintza Aduriz, puesto que Lara González, Paola Ferrari y Nadia Colhado jugaron los 40 minutos. Y aunque parezca increíble, la escuadra guipuzcoana se llevó el derbi frente a Gernika Bizkaia.

No pudieron dedicarle las vizcainas a su público el haberse clasificado para la Copa, al tiempo que perdían una oportunidad inmejorable para postular a terminar la primera fase como cabezas de serie. Desde el arranque, las donostiarras impusieron su estilo y su juego, y abrieron brecha en un abrir y cerrar de ojos. Después del 23-32 con el que terminó la primera mitad, la vuelta de vestuarios fue una alocada persecución del conjunto gernikarra, que llegó a consumar la remontada a falta de dos minutos después de amagar en varias ocasiones. Un triple de Naiara Díez adelantaba a Gernika Bizkaia 57-56, pero las locales fueron incapaces de sumar un punto más, mientras que IDK Gipuzkoa culminaba su hazaña de la mano de Lara González y Paola Ferrari, sumando así su primer triunfo a domicilio de la presente campaña.

Mayor acierto

No deja de ser una perogrullada afirmar que en baloncesto gana quien más acierta de cara a canasta, pero lo cierto es que IDK Gipuzkoa afinó mucho más que su rival, y que esa mejor gestión de los tiros le valió el triunfo.

23 canastas de 42 intentos –4 de 10 en triples– para las de Azu Muguruza, mientras que las gernikarras firmaban un 17 de 55 –7 de 23 en tiros de tres–. Asimismo, aunque las guipuzcoanas solo agarraron un rebote de ataque, por 13 las vizcainas, la labor reboteadora de Onintza Aduriz y Colhado fue determinante para soportar el asalto local, un asalto insuficiente liderado por María Asurmendi y Amisha Carter. María Pina y Jefferson, en cambio, tuvieron un pésimo día.

 

La reivindicación de la «banquillera» González

A la sombra de Arantxa Gómez Novo primero y Gabriela Ocete después, Lara González es una base que ha padecido muchos minutos de banquillo a lo largo de su carrera. Pero en los últimos partidos ha asomado la cabeza. Y por las circunstancias de tan corta rotación, acabó por erigirse en estrella.

La base donostiarra reconocía durante la semana que «mi objetivo es, cuando salto a la cancha, darlo todo, ayudar a mis compañeras y con eso que ellas jueguen mejor. Estoy logrando ese objetivo».A. G.