GARA
TENIS-ABIERTO DE AUSTRALIA

La veterana Lucic-Baroni, 79ª del ránking mundial, sigue sin despertar de su sueño

La croata accede a sus primeros cuartos de un Grand Slam 18 años después. En el cuadro masculino, destacará el Raonic-Nadal, ambos en el top-10 mundial.

El primer Grand Slam de la temporada está progresando de manera interesante hasta tal punto que ya están confeccionados los cuartos de final tras los encuentros de la octava jornada de ayer. E interesante está resultando la trayectoria de la croata Mirjana Lucic-Baroni, 79ª del mundo y de 34 años. La veterana tenista sigue sin despertar de su sueño al lograr los cuartos, sus primeros en un Grand Slam desde hace 18 años, al derrotar a la estadounidense de la fase previa Jennifer Brady por 6-4 y 6-2.

Lucic no llegaba a esta ronda en un grande desde Wimbledon 1999, cuando logró las semifinales. Su actuación está siendo espectacular, ganando cuatro partidos seguidos –entre ellos a la 3ª del mundo Agnieszka Radwanska–, olvidándose de un triste récord, pues antes de comenzar no se imponía en un encuentro en este torneo desde su debut en 1998 con 15 años.

Ahora querrá seguir soñando, aunque le espera la checa Karolina Pliskova, quinta de la WTA, que derrotó en octavos a Daria Gavrilova por 6-3 y 6-3. Johanna Konta y Serena Williams se enfrentarán también en cuartos al eliminar a Ekaterina Makarova –6-1 y 6-4– y Barbora Strycova –7-5 y 6-4–, respectivamente.

Raonic-Nadal en cuartos

En el cuadro masculino, a pesar de la eliminación de varios de los favoritos, como Andy Murray o Novak Djokovic, destacará por encima del resto el choque que disputarán mañana dos tenistas que se encuentran en el top-10 mundial. Por un lado, el canadiense Milos Raonic, tercero del ránking de la ATP, y por otro, el manacorí Rafa Nadal, noveno del mundo.

Ambos llegarán a la eliminatoria después de superar en octavos a dos rivales complicados y tras casi tres horas de partido. En el caso de Raonic, venció al castellonense Roberto Bautista por 7-6 (6), 3-6, 6-4 y 6-1. El canadiense, ayudado por unas pocas gotas de lluvia que cayeron a la pista antes de cerrarse el techo del Hisense Arena, aumentó la efectividad de su tremendo servicio y acabó imponiéndose con 33 saques directos –lleva 93 en cuatro partidos en Australia– y 75 golpes ganadores.

Por su parte, Nadal no juega unos cuartos desde Roland Garros 2015 al vencer a Gael Monfils por 6-3, 6-3, 4-6 y 6-4. El francés hizo gala de un descomunal servicio, con 15 directos y uno de ellos a 214 kilómetros por hora, a la vez que 52 golpes ganadores. Pero Nadal ganó porque cometió solo 26 errores no forzados, casi la mitad de su rival, y tuvo más fuerza, física y mental al final del choque.