Roger Federer y Venus Williams, ilustres veteranos que vuelven a soñar

La estadounidense jugará la final contra su hermana Serena tras ocho años, en tanto que el suizo reina en la pista de Melbourne siete temporadas después.

Roger Federer, de 35 años, y Venus Williams, de 36, son dos de los cuatro finalistas en el Abierto de Australia. El suizo, uno de los mejores tenistas de la historia, llega a este compromiso siete años después, y la estadounidense lo hace tras ocho años. Ella se las verá contra su hermana Serena y él, contra el ganador del Nadal-Dimitrov que se ha jugado esta madrugada. En caso de ser contra el manacorí, se produciría un salto atrás en el tiempo que permitiría volver a disfrutar de uno de los duelos más apasionantes que ha ofrecido la historia del tenis.

Ayer, Federer rompió su racha de cinco semifinales perdidas en Australia al vencer a su compatriota Stan Wawrinka por 7-5, 6-3, 1-6, 4-6 y 6-3, y luchará por su quinta corona en Melbourne. La última vez que levantó la copa de campeón fue en 2010. Wimbledon 2012 fue el último de sus 17 Grand Slams ganados, y el Abierto de EEUU 2015 la última vez que pisó la final de un grande. El domingo, con 35 años y 177 días, se enfrentará a la historia para intentar ganar su partido número 100 en este torneo, ya convertido en el finalista más longevo en un grande en la “Era Open”, tras el australiano Ken Rosewal –39 años y 310 días– en el Abierto de EEUU en 1974.

«Nunca, nunca, incluso en mis sueños más salvajes, pensé que llegaría tan lejos en Australia», dijo tras vencer a Wawrinka. «Estoy en la final, y lo sé. Sé que tengo la oportunidad de ganar y estoy en buena posición para hacerlo, independientemente de quién sea. Será especial, contra quien sea, porque uno irá por su primer Slam y, si no, habrá una épica batalla con Rafa», afirmó el suizo.

Serena, a por el séptimo título

En el cuadro femenino, la estadounidense Serena Williams, seis veces campeona, se situó a una sola victoria de recuperar el número uno del mundo, al derrotar a la croata Mirjana Lucic-Baroni, por 6-2 y 6-1 en tan solo 50 minutos para alcanzar su octava final en Australia, donde se enfrentará con su hermana mayor, Venus, que se impuso a la también estadounidense y verdugo de Muguruza, Coco Vandeweghe, por 6-7 (3), 6-2 y 6-3.

Si vence mañana, Serena superaría además a Steffi Graf y se colocaría a un solo título del récord del Grand Slam de Margaret Court (24). «La primera vez que gané un Slam era una niña y ahora todavía lo soy en mi corazón», dijo una Serena exultante. «Por supuesto que quiero ganar, pero es maravilloso si tu rival es tu hermana, es increíble. Ella es mi mundo, mi vida. Estoy muy feliz por ella, estar las dos es el gran sueño hecho realidad y no importa quién gane».

Será la segunda vez que ambas se enfrenten por el título en Melbourne Park. En 2003 el triunfo fue para Serena. La checa Hana Mandlikova, ganadora en dos ocasiones en Australia, el último hace 30 años (1980 y 1987), entregará a la campeona la Copa Daphne Ackhurst.

Serena y Venus se han enfrentado en 27 ocasiones, con 16-11 para Serena, que también venció en la última, en los cuartos de final del US Open 2015, por 6-2, 1-6 y 6-3. De ocho finales del Grand Slam disputadas, Serena ha ganado seis.