Joseba ITURRIA
CICLismo

El placer del sufrimiento

Mikel Elorza tuvo que abandonar ayer en el Trofeo de la Serra Tramuntana, pero disfrutó al verse junto acorredores del nivel de Valverde y Nairo Quintana. Está feliz con el Amore&Vita en sus primeras carreras.

Mikel Elorza (Azkoitia, 1991) debuta en la Challenge de Mallorca con profesionales y reconoce que disfruta a pesar de que sufrió ayer y tuvo que abandonar en el Trofeo Serra Tramuntana con 3.000 metros de desnivel y una climatología adversa.

«El jueves en el llano iba bien de fuerzas hasta que en una caída a falta de 30 kilómetros rompí la rueda, paré para cambiar y llegué cortado. Hoy de salida –explica Elorza a GARA tras abandonar– vi que no iba con fuerzas y me he tenido que bajar a pesar de que estaba disfrutando. El recorrido era muy duro y los World Tour lo hacen más duro con su ritmo».

Tras verse en el pelotón con Valverde y Quintana reconoce que «ves a tus referentes y se hace raro y es bonito. Se nota que tienen más de un punto que nosotros, pero si quieres andar con ellos hay que acostumbrarse». Hoy y mañana correrá las dos últimas pruebas de la Challenge de Mallorca y su intención es «dejarnos ver si voy mejor de fuerzas».

Después «el equipo tiene clásicas en Italia, no sé si las correré, y tenemos todo el año carreras. Getxo y Ordizia están aseguradas y esperamos hacer Zornotza, Lizarra y Rioja. Hay calendario en todo el mundo y carreras no nos va faltar».

Elorza está muy contento en el Amore&Vita: «Es un equipo consolidado de muchos años. Es humilde, pero dan todo lo que pueden por nosotros. Casi todos son italianos y tienen pasión por y para el ciclismo. Los corredores nos están ayudando a integrarnos en el equipo, como los mecánicos y directores nos están apoyando mucho».

Del mundo profesional le han llamado la atención «las infraestructuras, los autobuses y coches de los equipos... La dimensión de todo es mayor. Y llegamos hoy al hotel y esperaba un chaval para pedir un autógrafo. Me decía que le firmara una foto mía, le decía que sería de otro y me ha sacado una con el AMPO. Que sin hacer nada te espere un chaval en un hotel dos horas me ha chocado mucho y ésa es la diferencia entre una categoría y otra».

El salto tras una temporada de 40 días

El ascenso de Mikel Elorza ha sido una agradable sorpresa porque por una lesión solo pudo correr del 15 de agosto al 25 de setiembre y para ello tuvo que acelerar para coger el alta antes de tiempo: «Todos los sacrificios cuando estaba lesionado, el trabajo en el rodillo, salir a la carretera con peligro de lesionarse ha dado sus frutos. Es el resultado de muchos años de sacrificio». Para dar el salto, «al no tener manager, pasamos el currículum y contestaron al ver que tenía un bonito palmarés».

Ni soñaba en julio con dar el salto tan pronto, solo en recuperarse. Al concretarse se marca «el objetivo de dejarme ver todo lo que pueda y que se escuche el nombre de Mikel Elorza lo máximo posible, hacer lo que pida el equipo y disfrutar. En grupos muy grandes no, pero cuando estoy bien de forma subo bien y en las clásicas de Italia cuando tenga cierto nivel puedo aguantar en grupos pequeños y soy rápido. A ver si con el tiempo cojo ese nivel y consigo estar adelante». J.I.