«Europa enfrenta grandes desafíos internos y externos que (...) solo podemos superar trabajando juntos», afirmó la canciller alemana, Angela Merkel, en una comparecencia junto al presidente francés, François Hollande, en Berlín, donde preparan la próxima cumbre europea.

«Necesitamos un compromiso claro y común con la Unión Europea, a lo que hemos logrado y a los valores de nuestras democracias liberales», añadió. «Ambos coincidimos en nuestra convicción de que solo podremos afrontarlos conjuntamente», insistió.

«Hablemos con franqueza, la Administración americana plantea desafíos sobre las reglas comerciales, y también sobre la que debe ser nuestra posición para solucionar los conflictos en el mundo», concretó, por su parte, Hollande.

«Así que debemos hablar con Donald Trump, que ha sido elegido por los americanos para ser su presidente, pero debemos hacerlo con una convicción europea y la promoción de nuestros intereses y valores», añadió. Hollande señaló igualmente que el auge del populismo en el continente constituye una amenaza importante para la UE. «Para ser honesto, lo que amenaza a Europa no solo viene desde afuera. Viene también de adentro. Esto significa el surgimiento de extremistas que usan factores externos para provocar agitación interna», afirmó el presidente francés.

Hollande subrayó la necesidad de construir «una Europa nueva en un mundo incierto» y subrayó el particular papel que deben asumir París y Berlín, no porque quieran imponerse al resto de socios comunitarios, sino porque tienen «esa responsabilidad histórica».

«Hoy más que nunca Europa debe ser política», manifestó el presidente francés.

Merkel se refirió tanto a la «profunda ruptura» que supondrá la salida de Reino Unido del bloque, como a la necesidad de que los miembros de la UE se mantengan «unidos y ambiciosos» en la defensa «de las sociedades libres», una unidad que los Veintisiete deberán probar en la cumbre informal de Malta de la próxima semana y en la prevista después para conmemorar el sesenta aniversario del Tratado de Roma.