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Técnicos nucleares avisan de que no se debe renovar la licencia de Garoña

La Asociación Profesional de Técnicos del Consejo de Seguridad Nuclear emitió ayer un comunicado en el que recuerda que en Garoña no se han realizado las modificaciones de seguridad requeridas, por lo que no se debe renovar la autorización de su explotación.


Ante la posibilidad de que mañana mismo el pleno del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) emita un informe en el que autoriza la continuidad de su explotación, la Asociación Profesional de Técnicos del CSN publicó ayer un comunicado en el que recuerda que los responsables de la central «no han realizado las modificaciones necesarias requeridas para mejorar su nivel de seguridad». Concederle la licencia supondría de hecho «una exención encubierta» al cumplimiento de estos requisitos.

Los técnicos recuerdan que en abril de 2015 el CSN remitió un escrito a Nuclenor, titular de la central de Garoña, en el que se le requería «una revisión de su diseño y la implantación de determinadas modificaciones para actualizar su nivel de seguridad, entre las que se encuentran un nuevo sistema de tratamiento de gases, la separación física de cables eléctricos, la protección contra caída del techo del edificio de turbina, y el aislamiento de la contención primaria». Todo ello era condición necesaria para que se le renovara la licencia de explotación.

El propio Consejo de Seguridad Nuclear sabe que Nuclenor no ha tomado esas medidas. La Cadena Ser en Euskadi informó ayer de que un informe técnico del CSN reconoce que Nuclenor «no ha finalizado la implantación de esas modificaciones de diseño» y que se encuentran en distintos grados de avance. Pero el documento deja de lado estas faltas y añade que «quedan fuera del alcance de la presente propuesta de dictamen».

Según la emisora, en otro punto del dictamen técnico, el CSN afirma sobre los «asuntos pendientes» que «el titular ha adquirido los correspondientes compromisos para su resolución antes de la carga de combustible».

El pleno del CSN está compuesto por cinco personas, de las que tres han sido altos cargos del PP. Si el informe es favorable, el Gobierno de Mariano Rajoy tendría la última palabra.

De Andrés: «Inviable»

El delegado del Gobierno español en la CAV, Javier de Andrés, defendió ayer que la situación en relación a la central nuclear de Garoña es ahora la misma que hace cuatro años, y la resumió en que «se le hicieron unos requirimientos adicionales que condujeran a que la central no resultara económicamente rentable».

También De Andrés comentó que algunas de las medidas exigidas no se han llevado a cabo, y señaló que «el mensaje de la empresa es el mismo que antes, las exigencias del CSN hacen que esa central no sea rentable».

Habría que ver si eso sigue siendo así dependiendo de las condiciones que el CSN acabe imponiendo en su próximo informe.

Denuncia en Bruselas

El diputado general de Araba, Ramiro González, llevó ayer hasta el Parlamento Europeo su denuncia del oscurantismo con el que el Gobierno español está llevando este asunto, en el que se niega información requerida a instituciones como la Diputación alavesa. González participó en una jornada sobre desmantelamientos de centrales nucleares, en la que denunció que en Garoña se incumplen las directivas sobre seguridad nuclear.

EH Bildu calificó de «barbaridad» que el CSN pueda autorizar la reapertura de Garoña.