El Barça es el rival que da brillo a la fulgurante campaña babazorra

ALAVÉS - BARCELONA

En cierto modo, podría decirse que el Barcelona es el talismán babazorro de la presente temporada, el rival que le está dando brillo a la fulgurante campaña que están firmando los de Mauricio Pellegrino. Su triunfo en el Camp Nou –el único que han perdido los culés como locales– les hizo darse a conocer y la disputa ahora de la final copera con los blaugranas no ha hecho sino confirmar la tendencia.

Y el Alavés quiere darle continuidad a esa dinámica en Mendizorrotza, donde el miércoles la afición del Glorioso vivió momentos históricos y que quiere seguir subida a la nube coincidiendo con la visita de los de Luis Enrique, de ahí que las gradas del estadio gasteiztarra vuelvan a registrar otro lleno. Nadie quiere perderse el que podría ser el tercer triunfo liguero como local de la escuadra vasca, más irregular en propio feudo.

Después del palizón físico de entre semana, resulta harto complicado adivinar un posible once babazorro, en el que, a buen seguro, se entremezclarán futbolistas que vivieron sobre el verde la victoria frente al Celta con otros menos habituales. Aunque el equipo tiene bien embocada la permanencia, la temporada es larga todavía, de ahí que Pellegrino opte por dosificar esfuerzos, lo mismo que hizo Luis Enrique, dejando en Barcelona a un renqueante Piqué, en previsión del exigente encuentro que le espera este próximo martes en París.

Imposibilidad de San Mamés

El Alavés solo ha perdido uno de los dieciséis últimos compromisos que ha disputado, lo que da una idea de sus prestaciones, pero el técnico argentino no dudó en partir como víctima, al asegurar que «para ganar al Barcelona se tienen que alinear los planetas», argumentó en términos astronómicos.

Por otro lado, el Alavés recibió ayer mismo –lo había solicitado por la mañana– la confirmación de la imposibilidad de utilizar San Mamés como sede de la final debido a los preparativos del concierto que el grupo Guns N`Roses ofrecerá en ese mismo recinto tres días después.