El talento madridista se sirve de la floja defensa bilbaina

Los hombres de negro aguantaron hasta el descanso, a pesar de la exhibición de Sergi Llull y Carroll, el día del regreso de Tabu. Unparcial de 11-0 al inicio del tercer cuarto fue el escollo que los bilbainos no pudieron superar, pese a los puntos de Buva y Michael Eric.

REAL MADRID 104

RETABET B. BASKET 76

Nadie puede extrañarse de haber perdido contra el Real Madrid. El problema es que RETAbet Bilbao Basket mostró una flojera alarmante en defensa. Por mucho que el talento de Llull o Carroll sea cosa seria –29 y 25 puntos respectivamente, sumando 14 triples–, a los de Carles Durán hay que exigirles algo más.

La sensación era molesta desde el arranque, porque parecía que el Real Madrid jugaba con el freno de mano echado, a la espera del momento de finiquitar el partido. Entre tanto, los hombres de negro aguantaban la estela. Primero fueron los triples de Lapornik, titular ante la ausencia de Bamforth, y Tabu, de regreso de su lesión, los que ejercían de «chicle» en el zapato madridista, para que en el segundo cuarto fueran las continuaciones del pick’n roll central de Buva y la brega de Michael Eric los que hicieran la propio.

Con todo y eso, el Real Madrid se iba al descanso ganando 46-39, fruto de los 18 puntos de Llull –y eso que se dejó varios tiros libres–, punta de lanza de la lluvia de triples de los de Pablo Laso. Tan sobrado parecían los merengues, que Laso dio minutos al ex de Bilbao Basket Alex Suárez, que jugó de alero alto –cuando su puesto natutral es el de ala-pívot–, compartiendo cancha con Ayón y Reyes. Bilbao Basket no jugaba mal, pero echaba de menos los puntos de Mumbrú y Hervelle, mayor decisión de un Todorovic dubitativo y la defensa.

Rayos y truenos

Un parcial de 11-0, con Randolph en plan torbellino, despertó una tormenta con rayos y truenos en el consiguiente tiempo muerto bilbaino. Los de Carles Durán replicaron con un 0-8, pero la renta madridista ya nunca bajó de la decena. Más aún, se fue estirando hasta la paliza.

Resultó doloroso ver a un Bilbao Basket entregado a los designios de un Real Madrid que se permitió el lujo de superar la centena cuando quiso, de dar descanso a Llull en el último cuarto, o de que todos sus jugadores anotaran al menos dos puntos. Mientras, Buva hacía números en ataque, al igual que Michael Eric, pero nada más.

En fin, era cosa sabida que Bilbao Basket a día de hoy no está a la altura de la escuadra merengue, pero no deja de dar tristeza y rabia que un equipo que aspira a jugar los play offs dé un nivel defensivo tan flojo.

Durán: «Ellos nos han castigado cada error»

Carles Durán achacó la derrota al talento de Llull y Carroll, al mal arranque del tercer cuarto, y a una fatiga que diluyó «como un azucarillo» a Bilbao Basket. «Estábamos sin gasolina, el Real Madrid ha rotado y nos ha castigado cada error», explicó.

«En la primera parte no hemos estado mal. El Real Madrid ha metido 46 puntos pese a nuestra defensa, pero la clave ha estado en el arranque del tercer cuarto. Han salido mucho más agresivos y nosotros estábamos muy pasivos. Hay que entrenar bien y preparar los ocho partidos que quedan. Entrar en play offs sigue en nuestras manos», terminó. A.G.