Gesta de Polanc en el Etna, donde solo se vio a Zakarin
El esloveno del UAE culmina en el magestuoso volcán una escapada que mantuvo desde la salida.
«Ha sido el día más duro de mi vida, pero estoy muy feliz», reconoció entre jadeos el esloveno Jan Polanc, del equipo UAE Emirates, después de ganar la cuarta etapa del Giro con un épico final en el volcán Etna y tras permanecer escapado –primero con tres acompañantes y luego en solitario– los 181 kilómetros de que constaba la jornada.
Al margen de lo que deportivamente dio el día, hay que reconocer el trazado preparado por la organización dejó boquiabiertos a los aficionados que la siguieron por televisión con espectaculares imágenes de Sicilia desde la costa, donde comenzó, hasta el interior volcánico con final en el Etna. Un deleite para la vista. Por cierto, Bob Jungels, del Quick Step, es quien viste ahora la maglia rosa después de un día en el que el único de los favoritos que se dejó ver con ganas fue el ruso Ilnur Zakarin (Katusha) –aunque venía apremiado por los segundos que llevaba perdidos de antemano–, por que lo de Vincenzo Nibali (Bahrain-Merida) no dejó de ser una aparición para la galería. Para eso nos quedamos con la de Pello Bilbao (Astana), atacando a los mejores en la agreste ascensión, aunque luego lo pagó con un retraso de diez minutos.
Quien sí se metió entre los mejores fue Mikel Landa (Sky) a pesar del pinchazo que sufrió en plena subida a diez km de la meta. Su sobreesfuerzo mereció la pena porque le mete entre los diez primeros, muy cerca de su compañero, el galés Geraint Thomas, con quien, de momento, comparte jefatura de filas.
Hoy se disputará la quinta etapa con 159 km entre Pedara y Messina, otro día, el segundo en Sicilia, propicio para sprinters, aunque llegando a la localidad natal de Nibali nunca se sabe.
Landa, resignado
El alavés Landa, a pesar del percance en la ascensión, llegó en el mismo tiempo que los favoritos, por lo que celebró «que todo va de momento sobre lo planeado». Señaló que tuvo suerte de que «Sebastián Henao estaba al lado y me dio su rueda. Luego Philip Deignan me esperó para llevarme hasta el grupo».
«No ha sido el mejor día porque creo que pude pagar los esfuerzos al final, pero terminé contento porque no perdí tiempo», dijo para concluir que él y el galés Thomas están «al día con los objetivos marcados».
Debusschere, en Dunkerque
El belga Jens Debusschere (Lotto-Soudal) es el primer líder de los Cuatro Días de Dunkerque al ganar al sprint la etapa inicial de 197,1 km entre Dunkerque e Iwuy. Debusschere se impuso a los franceses Marc Sarreau (FDJ) y Clement Venturini (Cofidis).
Hoy se correrá la segunda etapa con salida y llegada en Saint Quentin, sobre 171,6 km.
Chris Froome considera que su atropello fue intencionado
Chris Froome fue derribado ayer de forma intencionada cuando se entrenaba cerca de Mónaco, sin que sufriera daños de importancia, según la denuncia que presentó el propio corredor.
«He sido golpeado voluntariamente por un conductor impaciente que me persiguió por el asfalto. Afortunadamente estoy bien. La bicicleta destrozada. El conductor prosiguió su camino», declaró.
Fuentes policiales reconocieron que será difícil arrestar al responsable, ya que no identificó la matrícula del coche implicado. GARA