El Lyon prolonga su reinado gracias a la tanda de penaltis

Se adjudicó su cuarto trofeo continental, el segundo de manera consecutiva,tras 120 minutos ante un PSG que llegó a la final con la lección aprendida.

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Como en la Copa de Francia de hace pocas semanas, la final de la Champions de ayer en Cardiff se fue a la tanda de penaltis después de una final, con prórroga incluida, llena de tensión y buen fútbol. En aquella otra ocasión se impuso el Olympique Lyon... y en la capital de Gales también lo hizo gracias a un último lanzamiento de penalti lanzado por la guardameta Bouhaddi, que lo hizo justo después de que su homóloga en la portería del PSG errase su pena máxima, para poner el definitivo 7-6.

No hubo revancha por parte de las parisinas, que vieron de esta manera tan cruel cómo las lionesas alzaban su cuarta Champions de la historia y la segunda de manera consecutiva.

Y eso que Patrice Lair, extécnico del Lyon y actualmente en el PSG, pareció haber sacado mejores conclusiones de los últimos dos enfrentamientos entre ambos equipos, con victoria para el Lyon en ambas ocasiones.

Con un esquema de 3-5-2, con la guipuzcoana Irene Paredes en la defensa izquierda y ambas jugadoras de banda (Ashley Lawrence y Eve Perisset) muy adelantadas, las parisinas dejaron el mando a sus rivales para robar y aprovechar la velocidad arriba.

Había cuentas pendientes entre ambos conjuntos, y también se vio reflejado sobre el terreno de juego, donde la tensión fue más que palpable. Pero también la calidad y las ocasiones. Más para el PSG, una vez que Alex Morgan tuvo que abandonar el terreno de juego por resentirse de unos problemas musculares. La estadounidense había cruzado el Atlántico rumbo a Europa para jugar este tipo de partidos, pero ayer solo duró 17 minutos.

Por raro que parezca, la primera ocasión de las parisinas llegó tras un error de la defensa del Lyon, que en Liga solo ha recibido seis goles mientras que ha anotado un total de 103.

Esta ocasión sin peligro tuvo su respuesta en los pies de una muy activa Majri. La jugadora de banda izquierda del Olympique disparó a media vuelta a las manos de la guardameta Kiedrzynek. Pero, sin duda, la mejor jugada llegó en el 33, con una costarricense Shirley Cruz que recortaba hacia el centro dentro del área pero que vio cómo la meta Bouhaddi se estiraba para detener su disparo.

El cansancio hizo mella

En la reanudación el Lyon estiró sus líneas, quiso tomar las riendas de la situación. Pero Hegerberg no tenía su día, primero porque su disparo rozó el poste y segundo porque se topó con la guardameta rival. Sin embargo, al igual que en la primera parte, la mejor ocasión llegó por parte del PSG. De nuevo apareció la calidad de Shirley Cruz para dar un pase en profundidad a Delie, que dentro del área envió su disparo fuera por muy poco.

El cansancio hizo algo más de mella en las parisinas, que dejaron más huecos, aunque las lionesas no supieron aprovechar y el partido se fue a la prórroga, donde el cansancio se prolongó hasta la fatídica tanda de penaltis, que contó con 16 lanzamientos y en la que la meta polaca Kiedrzynek quiso ser la heroína –ya lo había sido por sus paradas– y terminó siendo villana. El Lyon descansa más feliz.