Existe
Como se habrán dado cuenta ayer se jugó un partido de fútbol que según y cómo habrá ayudado a que suban las acciones de ACS, se habrá resuelto el conflicto catalán o simplemente habrá una confabulación. Digo esto sentado tranquilamente frente a mi televisor viendo cómo unos tipos dan vueltas a circuitos de asfalto montados en motos. Un supuesto deporte que me hipnotiza, es algo que incluso en sus clasificaciones me proporciona un estado neutro en mis preocupaciones y acabo vencido por las velocidades que se logran, por una lucha contra las centésimas de segundo en cada giro.
Es un espectáculo que se renueva televisivamente. Y donde vamos incorporando palabras, frases, dichos a nuestro uso cotidiano. Algo me temo que puede pasar con las carreras en pistas ovales que Fernando Alonso pisó en Indianápolis. Esa inversión económica puede ser el anuncio de una retransición de estos circuitos que conocemos de lejos y por el cine, no por sus directos.
Pues bien, estoy escribiendo esto escuchando una competición en el canal “esports” con un lenguaje que me descoloca, pero con una narrativa e intensidad parecido a un partido de baloncesto, una llegada de motos muy incierta o un gol de cualquier competición de fútbol, como el que están jugando los equipos de mujeres del Barça y la Real. Las gradas vacías, pero su presencia en la tele ayudará. Es decir, son juegos electrónicos, de esos que son un negocio, que juegan unos millones de seres humanos, que tiene sus códigos y que ahora, eso es lo que a mí me tiene prendado, tiene un canal exclusivo. Y si escuchan a los comentaristas, hablan de manera científica, saben, advierten, celebran, por lo que me quedo un rato escuchando esas palabras, esos neologismos que me fascinan. Existe, no lo estoy soñando.