GARA
LONDRES-PARÍS

Asediada, la premier se reune con el DUP y es recibida por Macron

Criticada a diestra y siniestra, la primera ministra británica en ejercicio, Theresa May, apeló al «espíritu de unidad nacional» en la primera sesión de los Comunes tras las elecciones del 8 de junio y en la que el líder laborista, Jeremy Corbyn, puso en duda que esté «en condiciones de ofrecer al país un liderazgo fuerte y estable» y advirtió de que su negociación con los unionistas del DUP amenaza crear una «coalición del caos».

No fue el único. El exprimer ministro británico John Major y artífice de las negociaciones que auspiciaron los Acuerdos de Viernes Santo se mostró »inquieto, cauteloso y dudoso» por el posible pacto con el DUP.

May calificó de constructiva la reunión ayer con la líder del DUP, Arlene Foster, quien auguró un cercano acuerdo.

Mientras el diario “The Daily Telegraph” revelaba que diputados conservadores críticos han iniciado conversaciones secretas con colegas laboristas para impulsar un Brexit suave, May viajó a París, dopnde fue recibida por el presidente francés, Emmanuel Macron, fortalecido tras la primera vuelta de las legislativas.