Alonsotegi deja sin efecto su «ordenanza mordaza» por evitar el debate social

El Pleno de Alonsotegi dejará el jueves sin efecto la tramitación para aprobar una ordenanza que impedía la colocación de carteles y pancartas en la vía pública. Tras la queja vecinal, se reinicirá el proceso.

Marcha atrás del Ayuntamiento de Alonsotegi en su pretensión de sacar adelante una ordenanza que, con la excusa de la protección de los bienes públicos de titularidad municipal y del mantenimiento de la convivencia, prohibía la colocación de carteles y pancartas, entre otros soportes de propaganda, en las calles. La normativa, denunciaron sus detractores, «tenía su fundamento en la conocida como Ley Mordaza, siendo una aplicación a las instituciones locales».

Después de su aprobación inicial y su publicación en el boletín oficial, los opositores a su implantación iniciaron una campaña de recogida de apoyos, que se concretó en la presentación el 26 de mayo de alrededor de un centenar de alegaciones. Entre los argumentos expuestos, estaba que se excedía en su ámbito de actuación, al contemplar elementos de titularidad privada en donde se pretendía sancionar, o que se limitaba la libertad de expresión e información de la ciudadanía al ser «excesivamente coercitiva».

Otro argumento expuesto, era que la ordenanza no había sido consensuada ni debatida por agentes sociales, sindicales y políticos. Se incidía en que el municipio no destaca por la suciedad en sus calles o la proliferación de «actitudes incívicas». Asimismo, se denunciaba que se impulsaba «la denuncia y la delación entre ciudadanos», lo que entendían podría ser motivo de confrontación.

Suspender su aplicación

Los promotores de las alegaciones propusieron que se dejará en suspenso la tramitación, dando comienzo a un proceso participativo para definir los términos de una normativa de estas características. Se solicitó la colocación de paneles informativos que ayuden a minimizar el pegado de carteles en bienes públicos y privados, así como la eliminacion del control previo a la colocación de pancartaas y carteles de cualquier índole.

El asunto fue estudiado por la secretaria del Consistorio, que emitió un informe en el que concluye que no se ha respetado la participación ciudadana, uno de los argumentos expuestos por los vecinos que se oponían. El informe argumenta que es necesario que en todo proyecto normativo se formule la consulta pública previa y la audiencia de los interesados, lo que no ha sucedido en este expediente.

Tras el pronunciamiento de la secretaria, el asunto fue tratado el jueves pasado en comisión informativa, acordándose dejar sin efecto el acuerdo plenario que inició la tramitación de la ordenanza. Además, se decidió establecer un periodo de consulta previa a partir de que la normativa se publique en la web del Ayuntamiento de Alonsotegi, entre otros pasos.