Raimundo Fitero
DE REOJO

Paranoicos

La Casa Blanca de Trump es más que una casa, más que un despacho oval, más que un jardín muy cuidado donde pasear a perros y otros animales de compañía: es un puto desastre; un puto foco de escándalos de toda índole. La última es que el recién nombrado Jefe de Comunicación Anthony Scaramucci ha dicho con énfasis: «Preibus es un puto paranoico esquizofrénico». Se refiere al Jefe de Gabinete de Donald Trump, Reince Preibus. O sea, un ambiente de trabajo ideal como para quedarse tranquilo. Porque la paranoia, esquizofrenia y otras sospechosas sobre al personalidad del hombre zanahoria son amplias y fundamentadas en sus comportamientos.

No es bueno hacer chistes de locos, pero apunto uno raro: “prefiero estar con una loca que con una cuerda. Las cuerdas atan”. No es bueno ver demasiado la televisión. Ya sea en la constante martingala de Telecinco con interesar al personal sobre las vidas de una cuadrilla de vividores del cuento del famoseo que culminó con una última sesión de “SV” de tono realmente cutre, muy maledicente y estéticamente de pasarela asiática de cuerpos y egos. Ya sea con los otros canales que nos revientan el sentido común a base de estarnos contando al segundo lo que hacen los del Govern catalá, convocando o no y los chicos de Rajoy en la parte del BOE con sus amenazas constantes que culmina con una desvergonzada declaración del presidente de Chucherías Rajoy asegurando no saber de parte de quién está la Guardia Civil interrogando a funcionarios catalanes y entrando en dependencias públicas.

Lo que sale por la tele es como para acabar todos frecuentando la esquizofrenia, la paranoia o la angustia vital. Indignación política la hemos agotado, tenemos que rellenar depósitos con urgencia. A no ser que de tanta que consumimos haya subido así la temperatura general.