Leo en “Desnivel” que la llamada Himalayan Database estará disponible sin cargo alguno para el gran público a principios de noviembre. Esta base de datos recopilada desde 1963 registra la historia viva del Himalayismo en Nepal realizada por Miss Elizabeth Hawley, una de las personalidades más curiosas que se han movido alrededor del mundo de la Alta Montaña. Retirada desde el año pasado con 93 años, “Miss Hawley” se fue a vivir para siempre a Kathmandu en 1960, primero como corresponsal de “Time” y “Life” y dos años más tarde de la agencia Reuters. Incisiva y precisa, interrogaba a las expediciones sobre sus propósitos antes y sobre sus logros después. Se dice que en su Database pudiera estar la verdadera historia del Himalaya: quién subió de verdad a tal cima y quién no, cuanto se pagó a tal oficial de enlace para que certificara la veracidad de un determinado ascenso… Me temo que ella, no habiendo subido nunca a la más mínima montaña, completaba estos ires y venires con cierto distanciamiento, aunque quizás no sea así a las personas implicadas. «¿Solo vais a escalar esa montaña, así sin más? ¿No os vais a tirar en parapente, ni traéis bicicletas, piraguas, nada?», nos preguntaba en cierta ocasión con una engañosa candidez de abuelita, que a duras penas ocultaba su ironía ante el devenir del Himalayismo y sus “exploits” y que a no pocos, solo a unos pocos, les inducía a una inexcusable falta de respeto.