Arnaitz GORRITI
DELTECO GIPUZKOA BASKET

A mitad de camino de toda gloria

Los donostiarras igualaron a 70 tras ir cayendo 32-52, pero no tuvieron fuerzas para los minutos finales.

DELTECO GBC 80

GRAN CANARIA 87


Delteco Gipuzkoa Basket se ha quedado a mitad de camino. A mitad de camino de la parte noble de la tabla clasificatoria, sobre todo, después de quedarse a su vez a mitad de camino de una remontada que llegó a rozar ayer ante Herbalife Gran Canaria. Los de Porfi Fisac remontaron 20 puntos de desventaja e igualaron el partido a 70, dentro ya de la recta final. Pero el cuadro grancanario demostró que tiene más recursos.

Fue un partido que empezó a contrapié para los donostiarras, se fue torciendo conforme pasaban los minutos y solo espabiló al verlo todo perdido. Una vez más, Kenny Chery fue el que lideró la remontada guipuzcoana, bien secundado por Henk Norel y Clark. Pero algo tarde, ya que una vez consumado el empate a 70, Delteco GBC encajó seguidamente un parcial de 0-7 y se descubrió a sí mismo sin fuerzas para volver a remontar.

Y eso que los de Luis Casimiro se dejaron hasta 10 de los 23 tiros libres que lanzaron. De hecho, ese mal día desde la «distancia de la caridad» fue la grieta de la que se valió la escuadra donostiarra para volver a la carga tras un inicio calamitoso en el tercer cuarto. Después de llegar con un 30-42 adverso al descanso, los de Fisac no estuvieron a la altura en el arranque del tercer asalto, y se vieron con un 32-52 en contra en muy poco tiempo. DJ Seeley, principal dolor de cabeza del cuadro visitante, hacía y deshacía a su antojo, y los errores, así en el tiro de tres –7 de 24– como en las pérdidas –al final, solo 16– parecían ser la condena de los locales. Xavi Rabaseda, que tiene una dura pugna con Paulí para hacerse con la plaza de cuarto alero, fue un incordio constante en defensa, porque sus manos rápidas dificultaban cada pase y cada bote.

Oliver, un viejo conocido

Con todo y eso, Delteco Gipuzkoa Basket no tiró la toalla. Kenny Chery empezaba a ver la canasta con suma facilidad y Herbalife Gran Canaria erraba tiros libres a pares. Y como el espíritu guerrero es una virtud innegociable en los equipos de Fisac, sus muchachos hicieron por darle motivos para creer, atambién para hacer creer a los 2.837 valientes de las gradas.

Pese a unas meritorias canastas de Brussino, Gran Canaria se había estancado al verse ganador antes de hora. Secundarios como Pardina, Salvó o el mismo Xabi Beraza añadían más madera a la remontada local. Así, la renta grancanaria bajó de la decena al entrar en la parte más emocionante del choque: 60-65.

Un triple de Alberto Oliver parecía poner punto final a la resistencia donostiarra, pero nada de eso, porque Kenny Chery había llegado. A golpe de triple del canadiense, los donostiarras empataron a 70, y afrontaron la recta final del duelo con plena convicción en su victoria.

No hubo opción, empero, ya que Gran Canaria respondía con un parcial de 0-7. Cinco puntos del «abuelo» Alberto Oliver, que en buena hora superó sus problemas físicos antes de acudir a Illunbe, más un DJ Seeley que, sin duda, fue el jugador más regular del partido. De la mano de Norel y Clark, los de Fisac se pusieron a tres puntos en dos ocasiones, 74-77 primero y 77-80 después, pero la falta de energía empezaba a asomar ante un Gran Canaria que ya no iba a dejar escapar el partido.

Tres puntos de Mekel, dos tiros libres de Seeley y un mate de Aguilar dejaron a los donostiarras compuestos y sin remontada, en un partido que se perdió mucho antes del empate a 70. Y es que la remontada fundió las fuerzas de GBC, que no puede permitirse dar ventajas a un rival de este nivel.