La Federación Guipuzcoana de Fútbol está recabando información y estudiando la fórmula para adoptar medidas contra el árbitro que prohibió el sábado que se hablara euskera en un partido de la Regional Preferente.

En este sentido, el secretario general de la Guipuzcoana, Patxi Gabilondo, tras expresar «la con- dena y rechazo absoluto» de la actitud del árbitro, explicó ayer que el colegiado Manuel Sarrión, formado en el Colegio de Huelva pero inscrito ahora en el de Gipuzkoa, podría ser sancionado hoy por el Comité de Competición, aunque lo sucedido no esté reflejado en el acta que redactó del partido Idiazabal-Elgoibar.

Antes del encuentro, el árbitro se dirigió a los delegados y entrenadores de ambos equipos para advertirles de que cualquier jugador o técnico sería expulsado si hablaba en euskera, tal y como han denunciado ambos clubes. La Federación recibió ayer un escrito conjunto de queja firmado por los presidentes del Idiazabal y el Elgoibar, Matías Aranburu y Jon Basurto, respectivamente. Esta denuncia puede servir, se- gún Gabilondo, para que el Comité de Competición tome una decisión, ya que, aunque habitualmente sólo lo hace sobre cuestiones reflejadas en el acta, podría entrar «si entiende que se ha vulnerado un derecho fundamental de las personas».

Tras el «caldo de cultivo»

Sobre esta cuestión, la presidenta del EBB del PNV, Itxaso Atutxa, afirmó que este incidente «trasciende la anécdota» y obedece a un «caldo de cultivo» surgido a «partir de decisiones políticas» de un «ultranacionalismo mal entendido».