Salgado pide «confiar en el grupo» para llevarse el derbi frente a GBC

El base bilbaino opina que «el equipo necesita a todos» en una campaña llena de cambios y en la que se echa en falta la estabilidad.

Con seis victorias después de 20 jornadas, RETAbet Bilbao Basket no está para tomarse vacaciones, aunque la Liga ACB deba tomarse un respiro –más– a cuenta de las ventanas FIBA. Precisamente esas ventanas han dejado a los bilbainos sin Tabu, Hammink, Redivo y Todorovic, así como un Ricardo Fischer que será sustituido por Nikola Rebic al retorno de las mismas. Lo que sea para preparar el derbi del domingo 4 de marzo frente a Delteco GBC, uno de los partidos que más vivamente está marcado en el calendario.

La historia personal y profesional de Javi Salgado liga al base de Santutxu a ambos clubes, pero en esta su campaña de despedida, un poco más, dado que ve cómo su equipo está padeciendo aún más sufrimiento del esperado, al tiempo que se enfrenta a una de las revelaciones de la temporada. «Típico equipo de Porfi Fisac, que sabe de qué va esto&indentHere;», avisa.

«Seguimos trabajando y tratando de progresar a todos los niveles, aunque todavía no podemos preparar cosas colectivas por nuestras ausencias», reconoce el base bilbaino, que aún ve lejos el derbi ante GBC. No obstante, es perfectamente consciente de que romper una racha de derrotas que arrancó frente a Obradoiro es clave.

«Las derrotas de fuera han sido ante Real Madrid y Barça y se puede contar con ellas, pero las derrotas de casa se llevan mal. Puedes perder, pero podíamos haber ganado tanto a Fuenlabrada como a Obradoiro; deberíamos haber tenido más opciones de ganarlos. Esos duelen de verdad porque se encadenan con las dos salidas más difíciles y el parón, que es lo peor, porque no paras de darle vueltas a las cosas y la gente se pone nerviosa», añade.

Todas las incidencias afectan

«Veníamos de ganar tres partidos seguidos ante buenos equipos. Pero ahora toca volver a hacer un fortín de Miribilla; crecer juntos desde casa», receta el base de Santutxu, consciente de que no hay más secretos.

Y consciente también en los malos días, todas las taras posibles se magnifican. «Las dos derrotas en casa coincidieron con la baja de Mickel –Gladness– y nos han hecho mucho daño en la zona. Entre todos debemos mejorar esas situaciones de defensa y rebote, y que el ataque irá con más facilidad a partir de ahí. El equipo ha tenido muchos cambios de jugadores, de entrenador... son situaciones que en algunas temporadas se dan, y eso hace que la estabilidad del equipo no sea fuerte y que cualquier pequeña incidencia afecta más», lamenta. «Necesitamos a todos. El trabajo en grupo traerá las victorias y con eso, volverá la confianza», afirma.

No hay tiempo para lamentarse, y menos ante un rival como GBC que no deja de sorprender. «Hay que estar concentrado cada día y además tenemos margen para hacer un final de temporada digno. Sobre todo ahora que llega Gipuzkoa Basket, uno de los equipos más sólidos y que más compite».

En la primera vuelta Bilbao Basket, a las órdenes de Carles Durán, ganó 87-91. «Hicimos un partido sólido, con mucho acierto por parte de Dejan –Todorovic, con 22 puntos– y logramos “frenar” a Norel. Aunque GBC es un equipo difícil de tumbar, tenemos que tener confianza en nuestro grupo y hacer de Miribilla nuestro fortín», remacha.

Bidaideak Bilbao BSR cae en cuartos de final de la Copa en la prórroga

La Copa de baloncesto en silla de ruedas cerró ayer el paso a las semifinales a los dos equipos que habían acudido a Burgos como cabezas de serie: el AMIAB Albacete cayó a primera hora ante el ANFIV Vigo por un ajustadísimo 68-69, y sobre todo, le sucedía lo mismo a Bidaideak Bilbao BSR ante el Gran Canaria, en partido que tuvo que dilucidarse en la prórroga y que terminó 74-77.

«Vinimos a dejarnos la piel para llevarnos a Bilbo la Copa, pero no ha podido ser. El equipo ha trabajado lo indecible, remado contracorriente durante muchos minutos, pero el destino de partidos así se juega en que una bola entre o no en los últimos segundos, y esta vez el aro no quiso entregarnos la victoria. Seguiremos intentándolo. Nuestra afición se lo merece». Con estas palabras cerraba el Presidente del club, Txema Alonso, el paso por Burgos de un equipo que se marchaba a los vestuarios con la tristeza en sus caras.

Ciertamente no disputaron el mejor de sus partidos de la temporada, pero sí supieron remontar los momentos de menor acierto. No obstante, tras llegar con empate a 65 al final del choque, fueron superados por los aciertos de Notje, Arambula y Sánchez. GARA