MAR. 07 2018 DE REOJO Lazos Raimundo Fitero Me ha llegado una propuesta para los jubilados: un lazo marrón, color mierda, para protestar por las pensiones. Regresión: antes se les llamaba a unos conciudadanos ‘‘españolazos” por ponerse uno de un color que no quiero recordar en la solapa. Mañana será un día sin lazos o con todos los lazos. Ver las reacciones de la prensa del pesebre de extremo-centro respecto a la huelga que proponen las mujeres solamente puede hacer confirmar la necesidad de atender de manera constante, cotidiana, diaria a lo que nos plantean las mujeres. Han acertado, como siempre, los reaccionarios: es una huelga política, porque política es la vida, porque políticas son las leyes que protegen o desprotegen a las mujeres, según el magistrado que la aplique, porque políticas son las decisiones para que no hay igualdad de salarios, igualdad de oportunidades. Y todo ese etcétera que es el código político que algunos seres humanos, nacidos varones, estamos a favor de la Igualdad. Vamos. En el plano político populista por excelencia, el fútbol, atendamos al lazo amarillo que lleva el ciudadano Pep Guardiola, entrenador del Manchester City. Existe una campaña que está muy bien preparada desde la prensa pesebrista española, los irresponsables con carta diplomática y otros le intentan prohibir que lleve ese lazo en los campos de fútbol. Le amenazan con multas y hasta con otras sanciones. En Inglaterra. En el siglo XXI. ¿Qué está pasando? Es una campaña magnífica para que los que no tenían ni idea del motivo de ese lazo amarillo, se enteren. Pero a la vez es un ataque a la libertad de expresión. Incluso a la libertad de vestuario. Pep puede cambiar el lazo por una bufanda o por una camisa amarilla, ¿se le prohibirían también? Este año, por Sant Jordi, las rosas serán amarillas. O groges para precisar.