Se escudan en el sufrimiento
El próximo sábado se celebra el intitulado “Día Europeo de las Víctimas del Terrorismo”. O sea, la jornada que los gobiernos dedican a socializar el rechazo a cuantos les han combatido. También el Gobierno Vasco al alimón con el español. Aquí nos dicen que el lema que preside el día es «Fue injusto» y pretenden que toda la comunidad vasca comulgue en lo que se presenta, sin ambages, como una condena histórica a la lucha de ETA, desde 1959 hasta 2011.
Urkullu y Ortuzar, con sus escuderos Fernández y Ezenarro, pretenden que haya unanimidad en su adhesión al proyecto español que no terminó de cuajar en Euskal Herria porque una parte importante de la sociedad vasca resistió ante el intento de asimilación diseñado a la muerte de Franco. Es el precio que han de pagar por el buen vivir.
Porque, puestos a hablar de injusticias, algo tendrán que decir las víctimas de Carrero Blanco, o los familiares de Quesada, torturado hasta el horror por Melitón Manzanas. ¿Fue justo el asesinato de José Miguel Ordeñana? ¿Y el de Joxe Arregi? Recuerdo a Xabier Galdeano y a Josu Muguruza. Y a Santi, por supuesto.
Y no todo es pretérito. La muerte de Xabier Rey también es injusta, sometido a condiciones extremas.
Injusto es sufrir, y punto pelota.
Pero como de lo que se trata es de convivir, busquemos la forma de no hacer sufrir al de enfrente y recordar cada uno a los suyos.
Comprendo y lamento a quien sufrió y sufre, porque nada me hace más humano. Solo pido que no me impongan a quien llorar. Es bastante sencillo, ¿no les parece?