La competición regresa tras el parón para afrontar la recta final del campeonato, en el que prácticamente todo está aún por decidir. Atlético y Barcelona pelean por el título, Zaragoza y Santa Teresa luchan por abandonar el descenso, en el que, matemáticamente, aún podrían caer cinco equipos; y también hay media categoría que aún, con mayores o menores posibilidades, puede ilusionarse por la Copa.

Un torneo del que solo una carambola apearía al Athletic, concentrado ahora en otra meta, mantener el tercer puesto, en el que vuelve a contar con un colchoncillo de cinco puntos. Bastantes más cuentas, y esfuerzos, tiene que hacer su rival. Un Rayo que recibe hoy a las rojiblancas (10.45, BeIn La Liga), con una desventaja de seis puntos respecto a la octava plaza. Obligado a ganar, por tanto, si no quiere que el curso se le acabe el 12 de mayo.

En el Athletic se asume que «va a ser un partido difícil, en un campo difícil. El año pasado ganamos pero sufrimos hasta el final. Y este año vamos a sufrir sí o sí». Algo que, en cualquier caso, tienen muy interiorizado las rojiblancas. «Este año no hay recompensa sin sufrimiento», afirma Joseba Agirre, que afronta los cinco últimos partidos como «auténticas finales. Ya sé que el tercer puesto no tiene premio como los dos primeros pero es una satisfacción personal. Nadie pensaba que podríamos estar así pero seguimos, nos merecemos el tercer puesto y lucharemos por ello».

Hoy también se disputa el choque entre Sevilla y Atlético (Gol, 18.00). La 26ª jornada se completa mañana con otros seis encuentros, incluyendo el Zaragoza-Real.