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PERFIL

El europeísta Djukanovic gana con el 53,9% las presidenciales en Montenegro

El europeísta Milo Djukanovic, «hombre fuerte» de la política de Montenegro, confirmó una vez más que domina el poder en el pequeño país balcánico al ganar el domingo en la primera vuelta las elecciones presidenciales con el 53,9% de los votos.


El candidato del Partido Democrático Socialista (DPS), el ex primer ministro y expresidente de Montenegro Milo Djukanovic, se impuso en las presidenciales con el 53,9% de los votos, por lo que no será necesaria una segunda vuelta. Tras él, Mladen Bojanic, un empresario apoyado por una amalgama de partidos opositores que aboga por estrechar las relaciones con Rusia, con el 33,4% de los apoyos.

El triunfo de Djukanovic permitirá afianzarse al DPS, también en el Gobierno, ya que, aunque la Presidencia tiene funciones puramente protocolarias y simbólicas, puede ejercer influencia política y muchos creen que Djukanovic tendrá un impacto fuerte sobre la política por su incontestable autoridad. Asegurará también el rumbo emprendido por el país, que en 2017 ingresó la OTAN, pese a las presiones de Rusia y a la negativa de la oposición, y está inmersa en negociaciones para incorporarse a la UE en cinco años.

Djukanovic, de 56 años, es el líder político indiscutible de Montenegro desde 1991, cuando por primera vez fue elegido primer ministro. Garante de la estabilidad y de las ambiciones europeas, para sus defensores, y creador de un sistema clientelar que perpetúa a su partido en el poder, para sus adversarios, se trata de una figura que divide a la sociedad montenegrina.

Además, la oposición no participa en el trabajo parlamentario desde las legislativas de octubre de 2016, cuyos resultados no reconoce hasta aclarar una supuesta intentona golpista prorrusa en la jornada electoral, que cree un «montaje» de Djukanovic para mejorar el resultado de su partido.

De apparatchik titista a padre de la independencia

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Economista, Djukanovic se inició en la política como funcionario de las organizaciones juveniles y se convirtió, a los 24 años, en el miembro más joven del Comité Central de la Liga Comunista de Yugoslavia, desintegrada a comienzos de los noventa. Cuando el presidente serbio Slobodan Milosevic derrocó al Gobierno comunista de Montenegro en 1990, cedió el poder a Djukanovic, quien un año más tarde era ya primer ministro de su país, a la edad de 27 años.

En 1997 entró en conflicto con su mentor, a quien tildó de «hombre del pasado».

Fue el principal impulsor del referéndum sobre la independencia de su país, que tuvo lugar en 2006. Como jefe de Gobierno –en seis mandatos– y del Estado (1998-2002), ha trazado la vía euroatlántica (UE-OTAN) del pequeño país balcánico.

En tres ocasiones se retiró de los cargos públicos (2006-2008, 2010-2012, y en 2016) para dedicarse a negocios y otras actividades, aunque siempre ha permanecido al frente del DPS.

Sus adversarios le acusan de crear un «Estado privado» en el que controla todas las instituciones y permite la corrupción, el nepotismo y un sistema clientelar. Desde 2011 preside la federación montenegrina de baloncesto, que practicó de joven.