GARA
parís

Investigan por conflicto de intereses al secretario general del Elíseo

La Justicia francesa investiga por posible tráfico de influencias al secretario general de la Presidencia, Alexis Kohler, principal colaborador de Emmanuel Macron, tras la denuncia de una ONG anticorrupción. La Presidencia habla de cargos «totalmente infundados».

La Fiscalía Financiera ha abierto una investigación sobre el secretario general del Elíseo, Alexis Kohler, brazo derecho del presidente, Emmanuel Macron, ante las sospechas de un posible conflicto de intereses en relación con sus vínculos con la naviera italo-suiza MSC, uno de los gigantes mundiales del sector. En concreto, trata de esclarecer si Kohler incurrió en algún delito durante sus etapas en el Ministerio de Economía y en la Agencia de Participaciones del Estado (APE), después de que la ONG anticorrupción Anticor formalizara una denuncia el viernes, por la que le acusa de «apropiación indebida», «tráfico de influencia» y «corrupción pasiva» por sus vínculos familiares –su madre es prima hermana de la esposa de su fundador– y profesionales –fue su director financiero un tiempo– con MSC.

La naviera se ha convertido en los últimos años en el principal cliente de los astilleros STX de Saint Nazaire, rescatados por diferentes gobiernos franceses, y que finalmente deben pasar a manos del italiano Fiancantieri.

La cuestión es saber si Kohler participó en las negociaciones sobre ese asunto, si era conocida su relación con MSC y si le benefició desde los puestos que ocupó. Porque a comienzos de la década de 2010 trabajó en la APE, en el sector de los transportes, y representaba al accionista público en los consejos de administración de Renault, Aeropuertos de París y STX.

Entre mayo de 2012 y marzo de 2014 fue director adjunto del titular de Economía, Pierre Moscovici. Y desde agosto de 2014 a agosto de 2016, director de gabinete de Emmanuel Macron, ministro de Economía, periodo en el que se siguió discutiendo sobre el futuro de STX. En agosto de 2016, y durante varios meses, pasó al sector privado para trabajar como director financiero de MSC hasta que tras la victoria de Macron, en mayo de 2017, se convirtió en el «número uno» de su Administración.