OLAIZOLA II 18

BENGOETXEA VI 22

Aquejado por esos eternos problemas en la planta del pie, Oinatz Bengoetxea estuvo a punto de renunciar a participar en este Cuatro y Medio de San Fermín, pero decidió sufrir ante un rival al laza como Laso. Contra Urrutikoetxea prefirió asumir más riesgos y, tras conseguir atar en corto al de Zaratamo, las cosas le fueron mejor, lo mismo que ayer ante Aimar Olaizola y así, por ese lado salvaje de la vida que en su día convirtió en canción Lou Reed, el de Leitza se ha hecho un hueco en la final del día de San Fermín en el Labrit, donde su empresa no le ha guardado un hueco en el torneo por parejas. De esta manera, se repetirá la final del Cuatro y Medio de 2017, en el que el de Asegarce venció por un solo tanto a Jokin Altuna en el Ogeta.

Ayer, en el horno de Sopela, se midió a un rival que no se le ha dado demasiado bien en el acotado, a decir verdad nadie ha brillado a menudo en la jaula ante Aimar, pero sí que encontró la vía de hacer daño a un Olaizola II que, al término del partido, reconoció que el de ayer fue uno en el que más incómodo se ha sentido nunca.

Sin poder restar

El de Goizueta estuvo especialmente contrariado en la primera parte del choque, en el que, con las pelotas antes de desgastarse, sufrió horrores en el resto. El cuero le hacía extraños nada más tocar pared izquierda y, el intercambio de golpes de poco peloteo, pero jugado a mucho ritmo benefició a Bengoetxea VI, que fue tomando ventajas tras el empate a 11, al que se llegó con solo 95 pelotazos.

A pesar de que quizá hubo demasiados errores por ambos bandos, por momentos se vio de nuevo a ese Oinatz rápido e intuitivo, osado y atinado en el remate, que fue abriendo huecos ante un Olaizola II que no encotraba la forma de poner un poco de pausa al partido.

Con el 11-18 con el que se llegó al segundo parón televisivo, todo parecía decidido, pero entre que las pelotas se fueron gastando y que Aimar Olaizola puso en marcha su gancho de zurda, el partido recuperó vida, llegando a acercarse a solo dos tantos. Sin embargo, primero con una gran dejada al txoko y con un enorme gancho al ancho desde el cuatro, Oinatz Bengoetxea consiguió cortarle el paso a un rival cada vez más convencido y podrá disfrutar de San Fermín como protagonista.

Iturain-Larrarte y Maite Ruiz de Larramendi-Arrizabalaga, final femenina

Lesaka acogió ayer la primera eliminatoria del primer Emakumezkoen San Fermín Torneoa en el que, dentro de un bonito ambiente, se decidió el nombre de las cuatro pelotaris que la mañana del 14 de julio disputarán la final en el Labrit. Será, sin duda, una jornada para una veterana como Maite Ruiz de Larramendi, campeona en todo tipo de torneos y que ha decidido dejar de competir internacionalmente.

A sus 44 años, acompañada por Olatz Arrizabalaga, campeona del Emakume Master Cup de parejas, vencieron sus dos partidos del grupo 2 con mucha solvencia, ambos por 18-5.

Sus rivales serán la también navarra Naroa Iturain y la guipuzcoana Miren Larrarte, que sufrieron bastante más para sacar adelante sus compromisos de un grupo 1 bastante más competido y emocionante.J.O.