Ion SALGADO
DESCENSO DE GOITIBERAS

UN GARGANTÚA DESBOCADO Y SIN FRENOS SE HACE CON LA TXAPELA

UN TRONCOMÓVIL, UN GARGANTÚA DESBOCADO, UN AVIÓN CON HÉLICES... TODO ES POSIBLE EN LA BAJADA DE GOITIBERAS DE FIESTAS DE GASTEIZ, ORGANIZADA POR LA CUADRILLA DE BLUSAS Y NESKAS LOS ALEGRÍOS. LUKEN GANÓ EN VELOCIDAD Y UZTARGI EN ORIGINALIDAD.

José, blusa de la cuadrilla Luken, se mostraba confiado. No tenía dudas sobre la fiabilidad de su goitibera. Una versión reducida del tradicional Gargantúa que ayer voló en el descenso organizado por Los Alegríos. Los 26 bólidos que participaron en este gran premio urbano tomaron la salida en la cuesta de San Vicente, junto al Gaztetxe, y pasaron la línea de meta en la calle Olagibel, a la altura de Correos.

Se lanzaron varias veces, y el más veloz fue el Gargantua de Luken, que salió propulsado por la fuerza de un nutrido grupo de blusas. Hizo mejor tiempo que Batasuna y Txirrita, que echó mano de un turbo humano llamado Tinín. Y el troncomóvil de Uztargi resultó que no era tan rápido como el de Pedro Picapiedra, pero al menos les sirvió para llevarse el premio al artilugio más original.

Novia a la fuga

Si se suman los puntos obtenidos por la velocidad y por la originalidad, la triunfadora del día fue la novia a la fuga de Txolintxo. «Esta goitibera es como un coche clásico de boda. Con una silla cómoda», explicó Arkaitz, el piloto encargado de trazar la curva del Farolón.

Arkaitz no fue el único representante de Txolintxo. Amaia, una neska de esta cuadrilla, también bajó por las cuestas que unen Alde Zaharra y el Ensanche pese a que, como reconoció, hasta ayer no tenía muy claro qué era una goitibera.

Tras probarlo puede que repita el año que viene, ya que la bajada de goitiberas se ha consolidado como una cita ineludible en las fiestas, que hoy recibirán a Zeledon Txiki y a Edurne.