El Paris Saint Germain inaugura el palmarés de la Gipuzkoa Elite Women Football Cup, la iniciativa que ha reunido este fin de semana en Zubieta al conjunto parisino, Real, Atlético de Madrid y Fortuna Hjorring.

El equipo galo, en el que Irene Paredes ejerció de nuevo de capitana, se impuso ayer al Atlético en la final de forma contundente (1-4), bastante más de lo que había hecho el viernes frente a la Real. Andrine Hegerberg adelantó al PSG en el primer tiempo y, ya en la reanudación, Pekel, Vagre y Bouzid aumentaron la brecha. La que fuera su compañera hasta hace escasos días Jenni Hermoso, ahora de vuelta en el Atlético nueve años después, marcó el gol de la honrilla colchonera de penalti en los últimos minutos.

Antes había sido la Real la que se había impuesto a otro campeón de Liga, el Fortuna Hjorring (1-3), lo que le permitió hacerse con el tercer puesto del torneo. Leire Baños adelantó a las blanquiazules al anotar una de las escasas ocasiones de un primer tiempo muy cerrado. En la reanudación, el equipo danés dio un paso adelante y la Real se lo agradeció marcando el 2-0 a la contra, con la firma de Nahikari. Un potente disparo de Olar acortó distancias pero las donostiarras todavía pudieron sentenciar con un cabezazo de Itxaso.

Un examen de entidad, como el del viernes ante el PSG, para una Real que el 1 de septiembre disputará la final de la Euskal Herriko Kopa con el Athletic y una semana después comenzará la Liga en Tenerife.

Tampoco le habrá venido mal el test al resto de participantes, que pronto se verán también inmersos en la Champions League. Precisamente el sábado se realizaba el sorteo de 1/32 de final, que se disputarán en septiembre. El PSG se enfrentará al St. Polten, el Atlético al Manchester City y el Fortuna a la Fiorentina.