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CICLismo

Jon Irisarri: «Vuelvo a ser el que era»

El ciclista del Caja Rural quiere despedir desde hoy bien en el Tour de Turquía un año en el que ha querido recuperar el peso y la fuerza perdida en 2017.


Jon Irisarri (Leaburu, 1995) participa desde hoy al domingo en la última prueba del World Tour en Turquía con ganas porque «estoy terminando bien el año tras empezarlo mal, estoy más fresco y disfrutando. Se hace larga la temporada, pero tengo ganas de competir y tengo ilusión de ir al Tour de Turquía».

Destaca que «es una carrera World Tour y, si haces algo en esa carrera, se ve en todos los sitios en televisión. Es una buena oportunidad para dejarnos ver. En el final de temporada hay pocas ganas en algunos, pero otros no tienen equipo para el año que viene y eso va a influir».

En su equipo «Pardilla llegará fuerte y la cuarta etapa termina arriba. Quitando ese día, que será el que decida la general y habrá que ayudarle, los demás tendremos libertad e intentaremos dejarnos ver y cada uno hará lo que pueda. Me han hablado bien de esta carrera. Dicen que hay sitios en Turquía problemáticos, pero siempre se le ha dado bien al equipo y nunca ha habido ningún problema. Hemos ganado la general, etapas, el equipo va con ilusión a la carrera y estoy contento de poder ir».

Irisarri hace un balance positivo de un año que «empecé mal. Tuve una infección, una sinusitis en diciembre que no se me curó bien. Siempre me notaba cansado. Di con un médico que me dijo qué podía ser, tomé antibióticos y en Rhône Alpes estuve mejor, en Noruega me vi a gusto y de ahí en adelante empecé a andar como quería».

«El año pasado cometí un error»

Explica que «el año pasado cometí un error. Adelgacé demasiado y perdí lo que era mi punto fuerte, el sprint. Mejoré mucho subiendo, pero nunca voy a ser escalador. Este año me he centrado en hacer bien gimnasio, mejorar ese sprint y esa fuerza y este final de año se nota el trabajo. En las últimas carreras de Italia me he notado con mucha más fuerza en el llano, eran duras y estoy volviendo a ser el que era en aficionados».

Quiere volver a ser un corredor rápido que pasa bien la media montaña: «Subo bastante bien y puedo pasar puertos que no pasan los sprinters puros. Esa es mi opción y, si no, meterme en una fuga y ser el más rápido. Quiero volver a ser un corredor que pasa la montaña y en un grupo de 20-30 puedo rematar. Es mi identidad».

Explica que «bajé entre cinco y seis kilos y este año he recuperado el peso. Me ha costado, he tenido que hacer mucho gimnasio, entrenamientos de fuerza y recuperar todo el músculo. Al perder mucha grasa, empecé a consumir músculo y me quedé bastante fino. Mejoré subiendo, tenía más resistencia, pero notaba que no tenía fuerza al llegar en un grupo para sprintar. Ahora he ganado esos 5-6 kilos y no he perdido subiendo porque, como tengo mucha más fuerza, muevo más vatios. Pierdes algo, pero no mucho, y en el llano, en los látigos y los sprints noto mucha mejoría. He dado un paso adelante y aguanto mucho mejor las carreras y el día a día».

En su segundo año como profesional «me voy adaptando. Desde Noruega me noto más hecho a la categoría, el día que toca trabajar puedo hacerlo bien y, si hay que pillar una fuga, el año pasado podía salir a dos ataques y ahora a muchos más y sin dificultad para acabar carreras. Ha habido días en los que me he visto muy bien y no he podido lucir mucho porque estoy en un equipo en el que toca pillar fugas como en Portugal. Pillé bastantes, pero siempre algún equipo tiraba para anularlas y no llegó ninguna».

No olvidará la Volta a Portugal porque «ha sido psicológicamente la vuelta más dura que he conocido. Los primeros días con 47 grados eran muy duros e ibas al hotel y no tenías aire condicionado y en la habitación había 32 o 38 grados, no podías dormir sudando todo la noche».

De cara al futuro anuncia que «seguiré en el Caja Rural. Estoy contento, me dieron al oportunidad, las dos partes estamos contentas y me siento como en casa». Asume que el año que viene tendrán más presión para asegurarse la presencia en las grandes con el cambio de reglamentación de la UCI: «Los equipos van a tener que ganar o hacer buenos resultados. Eso se nota y nuestro equipo y todos se están reforzando y se pone más difícil estar en profesionales. Cada vez hay más nivel, más corredores que quieren venir y estoy contento. Me siento privilegiado de poder estar en profesionales. Llega una época del año en el que la gente se pone nerviosa y tengo la suerte de seguir en el Caja Rural y a ver si en 2019 damos un salto más».

Euskadi Murias despide su gran año en el World Tour

Euskadi Murias también participará en la despedida de su gran año en la última vuelta del World Tour en Turquía con Edu Prades como líder para la general y Enrique Sanz para las llegadas al sprint. Mikel Aristi, Ander Barrenetxea, Barceló, Sergio Rodríguez y Beñat Txoperena completarán el equipo que dirigirá Rubén Pérez.

La prueba turca presenta seis etapas y destaca la cuarta del viernes con final en el alto de Selçuk y 205 kilómetros. Las demás parecen propicias para los sprinters. A pesar de ser una prueba del World Tour solo participarán nueve equipos de la máxima categoría y con pocos grandes nombres. BMC presenta a Roche, UAE al ganador del año pasado Diego Ulissi, Astana a Lutsenko, Trek a Degenkolb, Quick-Step a Gaviria y también correrán Katusha, Bahrain, Bora y Sunweb. Caja Rural participa con Pardilla, Irisarri, Serrano, Ferrari, Josu Zabala, Reis y Silva y estarán los continentales profesionales del Burgos-BH, Delko Marseille, Postobón, CCC, Gazprom, Sport Vlaanderen, Aqua Protect y Wilier y una selección turca.

Además se corre hoy en Italia la Tre Valli Varesine, en la que Valverde estrena su maillot de campeón del mundo. Movistar y Caja Rural corren sin ningún ciclista vasco.J.I.