Con toda la fanfarria, llegó el Opening Night de la NBA, con victorias por todo lo alto de los Warriors y los Celtics sobre Oklahoma y Philadelphia, respectivamente. Quédense con la copla, porque lo mismo será la finalísima en junio.

Los «Orgullosos Verdes» ganaron a los Sixers por aplastamiento, 105-87, con 23 puntos de Jayson Tatum, aunque Rozier, Jaylen Brown, Marcus Morris y Gordon Hayward también superaron la decena; solo Embiid, Simmons y Redick hicieron lo propio en el bando rival.

Fue un día especial para Kyrie Irving y Hayward, ya que al fin pudieron dejar atrás unas lesiones de larga duración que los dejaron en el dique seco la pasada campaña, fundamentales para caer en la Final del Este frente a los Cavaliers. Ambos rindieron a buen nivel, aunque el líder del grupo fue Tatum.

Rebelión sin Westbrook

A pesar de la ausencia de Cousins, los Warriors pudieron con Oklahoma –que jugó sin Westbrook–, pudiendo lucir con alegría el anillo que recibieron en el parqué del Oracle Arena.

A pesar de los 27 puntos de Paul George y los 21 de Schroeder, Kevin Durant –27 puntos– y Stephen Curry –32 tantos, 9 asistencias y 8 rebotes– se unieron para evitar la sorpresa y brindar la victoria a su público.