Raimundo Fitero
DE REOJO

¿A quién?

En Teledeporte de TVE dedican esfuerzos económicos, técnicos y personales para hacer una cobertura de ese acto publicitario de colonización que conocemos como el rallye de Dakar. Antes era un asunto de pijos y marcas europeas que empezaban el año yendo con sus vehículos desde París hasta el Atlántico, en Dakar, pasando por territorios desertizados, poblaciones hambrientas y creando un discurso televisivo que sembraba la confusión, un contraste insufrible entre el despilfarro y la necesidad.

No quiero pasar por encima el detalle de un atropello mortal de un espectador y la huida del conductor sucedido hace pocos días sin que se haya incidido demasiado en el asunto. Antes fue Chile, después Argentina y Chile, ahora Perú e irán atropellando la dignidad de todo el cono sur americano a poco que les dejen. Y yo, al ver el despliegue de TVE, me pregunto de manera rutinaria: ¿a quién sirve este evento? No quiero saber los porqués, sino a quién deben pleitesía o contrato en vigor para hacer de esta carrera de monstruos sobre ruedas este acto de difusión tan excesivo. No veo en los otros canales mucha atención. La justa. ¿Es marca España? ¿Lo paga Repsol? Quizás sea una mezcla de casi todo, es en Latinoamérica, también conocida como Hispanoamérica por algunos sectores en revaloración política.

Y todo se me agiganta al escuchar una teoría, no sé si es una noticia falsa, una intoxicación, pero que puede ser bastante real, y es que, al hablar del éxito de las series, todos ponemos a “Los Soprano” como el inicio de esta época gloriosa. Y resulta ser que algunos aseguran que esa serie se realizó con el soporte económico de varios sectores de la Mafia. Claro, un mafioso que va al siquiatra es un mensaje integrador de incalculable valor. Un contraste. Sofá y/o confesionario. Parece muy claro a quién servían los guionistas.