Imanol Alguacil ha cerrado el primer bloque de cinco partidos disputados en quince días con siete puntos sobre nueve posibles en Liga y con una eliminatoria muy digna en la Copa, en la que solo el mayor valor de los goles fuera de casa permitió al Betis pasar a cuartos de final.

Pero tan importante como los resultados, que son lo fundamental en el fútbol y más cuando un club se ve obligado a sustituir a su entrenador tras cuatro derrotas consecutivas, es la recuperación de jugadores y las sensaciones positivas que trasmite el equipo cuando ante el Alavés parecía estar hundido sin capacidad de reacción.

En Vallecas, tras dos partidos muy exigentes en la misma semana y con pocos cambios con respecto al equipo que jugó el jueves, la Real fue capaz de reaccionar a una desventaja de dos goles y obtener un punto que le mantiene octava empatada con el Valencia a cinco puntos del sexto, el Getafe, y a tres del séptimo, el Betis. Los puestos de descenso quedan a seis puntos con dos partidos en casa seguidos ante Huesca y Athletic para confirmar esta tendencia y consolidarse en la zona alta y alejar la de riesgo que marca el Rayo.

La Real está en solo tres partidos de Liga donde debe estar, en la pelea por las siete primeras plazas. Y lo ha conseguido al recuperar los jugadores la alegría con la forma de jugar en la que creen, muy similar a la que les hacía disfrutar con Eusebio y a la que comparten todos los equipos de la cantera, con un 4-3-3 y un intento por tener el control del juego y la posesión.

Recuperación de jugadores

Eso ha permitido recuperar a los jugadores básicos que no se encontraban cómodos antes. Illarramendi vuelve a ser el eje del juego de su equipo y Willian José la referencia ofensiva. Lleva cuatro goles, ha dado otros dos, y vuelve a ser la salida sistemática de su equipo. Y Rulli ha sido clave en tres partidos en los que ha evitado la derrota de su equipo con grandes intervenciones y además trasmite más seguridad a la hora de jugar el balón.

Oyarzabal rinde mejor ahora en la banda, con tendencia al centro, que desde la posición de media punta, en la que Merino ha marcado dos goles en los tres partidos que ha jugado de titular y ha dado una asistencia cuando no aportaba nada en los últimos partidos de 2018. Aihen Muñoz ha irrumpido con fuerza para cuestionar la apuesta por Theo, Pardo jugó y marcó en el Bernabéu y los últimos dos partidos han demostrado que Zubeldia puede jugar bien en el puesto utilizado por Zurutuza en los últimos años para ser compatible con Illarramendi.

No todo es positivo. La Real ha encajado seis goles en los tres últimos partidos. Ese dato es engañoso porque se han concedido menos ocasiones que en los dos primeros en los que no recibió ninguno. El Espanyol solo fue capaz de crear las dos de los goles en igualdad numérica y uno lo marcó en su primer corner y el segundo en fuera de juego, el Betis marcó en sus únicas ocasiones y el Rayo en las dos que tuvo en los primeros setenta minutos. Lo más importante defensivamente es el número de oportunidades que se conceden y no es normal encajar gol en casi todas.

No todos los jugadores han salido beneficiados por el cambio de entrenador y Juanmi es el gran perjudicado. Lo único que se le puede discutir a Imanol es que haya preferido a Sandro cuando salía de una lesión y está muy ansioso y que prefiriera a Theo antes que a Muñoz después de los dos partidos que jugo el navarro y la apatía y los problemas defensivos que tiene el lateral del Real Madrid.

Imanol se marcó el objetivo de que todos los jugadores dieran su mejor versión y quiere aprovechar las grandes cualidades de Theo y Sandro, pero a los dos les falla la cabeza para saber superar situaciones en las que las cosas no salen como quieren. No tiene demasiado sentido apostar por recuperarlos a costa de dejar en el banquillo a jugadores que tienen contrato en este club y que están mejor ahora.

Pardo completó el entrenamiento con normalidad

La Real se entrenó ayer en Zubieta en una sesión en la que no llegaron a saltar al césped los titulares del domingo en Vallecas y en la que Rubén Pardo se ejercitó con total normalidad tras no poder participar en los últimos cuatro partidos por lesión. Junto a él trabajaron los jugadores del primer equipo Zaldua, Raúl Navas, Merino, Juanmi, Sandro, junto a los porteros Rulli, Moya y Zubiaurre, los dos con contrato con el primer equipo y ficha con el filial, Guridi y David Concha, junto con los jugadores del Sanse Guevara, Aihen Muñoz y Le Normand.

David Concha realizó casi todo el entrenamiento con normalidad y solo dejó de jugar, como Rulli, el mini partido de cinco contra cinco organizado en un espacio reducido con el que concluyó el entrenamiento. Zurutuza y Kevin Rodrigues hicieron carrera continua por separado dentro del proceso de recuperación de sus lesiones, pero estuvieron poco tiempo sobre el césped y parece complicado que puedan llegar para el domingo. Los demás lesionados –Gorosabel y Bautista– no llegaron a saltar al césped.

La Real descansará hoy. Mañana a las 10:30 empezará a preparar con un entrenamiento en Zubieta a puerta abierta el partido del domingo en Anoeta con el Huesca (18:30). Desde el jueves al sábado se entrenará a las 10:30 en Zubieta a puerta cerrada.J.I.