Sí que lo ha hecho en Copa, pero en Liga la Real mantiene una auténtica maldición con Marcelino García Toral, al que no ha conseguido vencer en el torneo de la regularidad, pese a haberse medido al técnico asturiano hasta en 18 ocasiones en esta competición, dirigiendo al Recreativo, Zaragoza, Racing, Sevilla, Villarreal y Valencia.

Este próximo domingo la escuadra txuri urdin dispondrá de una nueva oportunidad para desquitarse de tan mal fario, visitando a una escuadra che que se encuentra en alza, con una única derrota –Mendizorrotza– en las últimas ocho jornadas que ha disputado. En cambio, Mestalla es un escenario que se le ha dado especialmente bien al cuadro guipuzcoano en sus recientes visitas, con cinco triunfos en siete desplazamientos realizados.

Además, contará con la ventaja de que el Valencia habrá disputado semifinales coperas entre semana, una eliminatoria para la que se espera que Marcelino emplee a sus piezas más importantes. Ese desgaste podría ser beneficioso, a juicio de Diego Llorente, si bien el conjunto levantino «tiene una plantilla muy amplia y con calidad, además de que está preparado para competir cada tres días sin problema».

El defensa, que ha jugado todos los minutos desde que Imanol Alguacil llegó al banquillo, avanzó que el encuentro «va a ser duro, pero iremos a por los tres puntos e intentaremos seguir recortando distancia con los que están más arriba».

No se ha visto la mejor versión

Diego Llorente apuntó que al equipo aún le queda trecho para alcanzar su mejor punto de forma. «Todavía creo que no hemos llegado a alcanzar la mejor versión, pero estamos en el buen camino. Nos queda mucho por recorrer y ahora hay que olvidar el derbi y centrarse en el partido ante el Valencia». Un apartado importante será el de mantener la portería a cero, algo que la Real lleva realizando en los dos últimos encuentros.

En el plano personal, destacó que «ahora estoy en un buen momento, todos los minutos que he perdido por la lesión los quiero recuperar y seguir progresando». En cuanto a su futuro, lo ve en clave txuri urdin, porque pensar algo diferente ahora «sería un error».