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Interview
KOTTE EZENARRO
ALCALDE DE HENDAIA

«El Estado que impone el G7 debe velar por personas y bienes»

El alcalde socialista se vio obligado a aceptar que Hendaia reciba la cumbre alternativa que precederá a la cumbre del G7. Las reuniones que ha mantenido con representantes de la plataforma G7 Ez! le hacen ser ahora más optimista sobre el buen desarrollo del evento pero insiste en «sopesar los riesgos».


Reuniones con representantes de la plataforma G7 Ez!, intercambios con representantes del Estado, encuentros con comerciantes y entidades ciudadanas… la cumbre alternativa que se celebrará entre el 19 y el 26 de agosto entre Irun y Hendaia centra las preocupaciones del alcalde socialista de la localidad costera labortana, que habla para Mediabask de los preparativos de ese encuentro.

Faltan algo más de dos semanas para la apertura de la contracumbre. ¿Cuál es estado de ánimo del alcalde de Hendaia?

Parto de la idea de que no es conveniente generar un clima de ansiedad. En tanto que alcalde, en todo caso, estoy obligado a sopesar los riesgos, de ahí que solicitara al prefecto y al subprefecto que acudieran al pleno municipal para responder a las dudas de los electos. En una segunda reunión, los representantes del Estado se entrevistaron con los organizadores de la contracumbre y estos últimos también pudieron explicar sus planes al pleno municipal. Finalmente, hemos organizado encuentros con los comerciantes, que han escuchado a los representantes de la Prefectura. Los organizadores de la contracumbre también se han implicado, finalmente, en ese diálogo con los comerciantes.

Algunos comerciantes han llevado sus quejas a la Alcaldía.

Efectivamente. Hace algo más de una semana vino a expresar esas reservas un colectivo de unas 200 personas, en su mayor parte comerciantes, preocupados, especialmente, por la manifestación convocada para el 24 de agosto. Vinieron a verme en busca de apoyo a la solicitud que han puesto en marcha para que el Estado haga pública una declaración de prohibición de apertura comercial a fin de que puedan pedir compensaciones a sus aseguradoras. Mi impresión es que los servicios del Estado no están muy abiertos a este tipo de peticiones.

¿Se sabe cómo va a discurrir esa manifestación? ¿La circulación va a estar bloqueada?

No se va a bloquear la circulación. A la espera de concreciones, la idea sobre la que se trabaja es una marcha de mañana, que parta del sector de Tribord y concluya unas dos horas más tarde en Ficoba. Ese es el diseño de partida, aunque no está todo cerrado. Habrá desviaciones en la circulación, pero no va a haber un bloqueo.

Se ha quejado de que el Estado le haya impuesto la celebración de la contracumbre cuando los propios organizadores se decantaban por Baiona.

Así ha sido. El prefecto me dijo exactamente que no tenía otra opción que aceptar esa decisión. Eso no quiere decir que sea contrario a la cumbre alternativa al G7 y, a estas alturas, lo que quiero es que discurra en las condiciones que se han fijado y que la plataforma anti-G7 ha asumido. Los organizadores de la manifestación quieren que esta refleje la defensa de un mundo mejor. A partir de ese esquema, doy por hecho que hablamos de una manifestación pacifista, reivindicativa, solidaria... hablamos del derecho de manifestación y no seré yo quien se oponga al ejercicio de ese derecho.

¿Ha recibido garantías sobre el desarrollo de esa protesta?

Los organizadores expresan esa voluntad y yo quiero mostrar mi confianza, porque mis interlocutores son militantes de Attac, Bizi, CGT, LAB, Confédération Paysanne… que yo considero que son gentes respetuosas con la palabra dada. La duda a la que nadie puede responder es si una veintena de personas va a inmiscuirse y romper una protesta pacífica. Y, claro, la responsabilidad de lo que ocurra finalmente recaerá sobre el alcalde. Al día siguiente, cuando todo el mundo haya pasado ya la escoba y bebido el champán, me gustaría que no me tocara beber un vaso de vinagre.

¿Tiene mejores garantías de los representantes del Estado?

El Estado no ha informado ni confirmado nada por escrito a este alcalde. Tampoco se ha dirigido a los comerciantes. La Alcaldía, sin embargo, no puede hacer gran cosa, porque la responsabilidad es del Estado.

Siguiendo con la logística, ¿se puede descartar del todo el bloqueo de la muga?

La frontera va a estar abierta. Las fuerzas de seguridad han dado su palabra de que mantendrán una presencia discreta. Es lo más conveniente, porque no podemos olvidar que estamos en pleno retorno de vacaciones de agosto. Ya sabemos que basta con que unos cuantos camiones bloqueen el paso para que se produzca un colapso que afectaría tanto a Hendaia como a Irun. El día de la manifestación (24 de agosto) quedará en manos de la Policía española y de la Ertzaintza hacer lo propio, para que fluya el tráfico y la gente que acuda a la marcha pueda desplazarse tranquilamente de Hendaia a Ficoba-Irun.

La presencia de la cumbre se prolongará más allá del 24…

Los organizadores mantendrán el campamento en Bordaberri hasta el 26. Durante la contracumbre, los desplazamientos se harán desde ese lugar hasta las conferencias y talleres. La Mancomunidad Vasca asumirá el transporte en autobús desde el campamento hasta la frontera. Además del cine Varietés, hemos puesto a su disposición la zona del puerto de Kaneta y la escuela Jean-Jaurès. Con todo, la sede principal será Ficoba, que se abrirá en su totalidad para acoger los debates, tras la gestión que yo mismo hice para convencer al alcalde de Irun.

Todo eso suena a mucha gente.. y usted ha remarcado más de una vez las limitaciones de una ciudad como Hendaia.

Me dicen que pueden venir en torno a 12.000 personas o incluso más. Efectivamente, no se puede ocultar que va a ser complicado. Hendaia es la ciudad de la costa labortana con más limitaciones de espacio. En verano nuestra población se triplica. En la fiesta del 14 de julio registramos la presencia de 50.000 personas. ¿Cómo acogemos a esas 12.000 personas suplementarias? Solo disponemos de 4.000 plazas de aparcamiento… De entrada, la recomendación que se impone es evitar el vehículo, pero todos sabemos que eso es más fácil de decir que de hacer.

¿Tiene datos sobre cómo se va a financiar el costo de este encuentro internacional?

El Estado evoca un presupuesto «modesto» para la cumbre del G7 en Biarritz: se habla de unos 30 millones de euros. Creo que, si finalmente las cosas no salen tan bien como se desea, lo lógico es que una parte de ese presupuesto sirva para compensar a las personas, a título privado o comercial, por las pérdidas o perjuicios de distinta naturaleza que deban soportar, ya que, insistamos una vez más, es el Estado y sólo el Estado el que impone este G7, y por tanto es el Estado el que tiene la obligación de garantizar la seguridad de las personas y de sus bienes.