La ambición de Imanol y Portu llevan al coliderato

El técnico oriotarra no se conformó con el empate, dio entrada a Januzaj por Sangalli y ese cambio permitió al murciano marcar su segundo gol. El Granada había empatado en una falta directa en la que falló Remiro.

GRANADA CLUB FÚTBOL 1

REAL SOCIEDAD 2

La Real se coloca en lo más alto de la clasificación tras ganar un partido equilibrado en el que no fue superior al Granada y en el que resultó clave el acierto de Portu en sus dos ocasiones y la ambición de Imanol. Buscó con sus cambios la victoria y la encontró gracias a una jugada de Januzaj, que aprovechó sus primeros minutos desde el 29 de setiembre al máximo al robar el balón en su campo y dar un pase perfecto para que el murciano lograra el tanto que daba los tres puntos en el minuto 89.

A Imanol le hemos señalado tras las derrotas, algunas veces por su valentía, pero el puesto que ocupa la Real en la tabla es un reflejo de la ambición de un entrenador que nunca se conforma con un empate y busca siempre la victoria. Por eso la Real lleva siete triunfos y un solo empate en doce partidos. Por eso Imanol no se conformó con un buen punto en el campo de un equipo que marchaba por delante e introdujo dos cambios ofensivos al dar entrada a Willian José y Januzaj. Con la entrada del de Bruselas en la derecha, Oyarzabal pasó a la posicion de Sangalli y Portu a la banda izquierda y ese cambio tuvo efectos en el marcador porque el de Bruselas fabricó la jugada que dio la victoria a su equipo.

Una complicación añadida

La Real ganó en un partido en el que tuvo que sobreponerse a la baja de Odegaard y a un problema suscitado por no poder aterrizar su avión en Granada por el viento y tener que hacerlo en Málaga. Los jugadores se vieron obligados a viajar en taxis hasta el hotel de concentración. La Real salió a las 10:30 de Zubieta y llegó a Granada a las 15:10 cuando estaba previsto que aterrizaran a las 12:45, con la inquietud y el cansancio que generó en la expedición la complicación del viaje. Pero este equipo ni su entrenador nunca buscan excusas y compiten siempre hasta el final y por eso se han sumado muchos puntos en los últimos minutos de los partidos.

Imanol recuperó el esquema habitual e introdujo tres cambios con la vuelta al once de Joseba Zaldua, Portu y Willian José en detrimento de Gorosabel, Isak y Odegaard, cuyo puesto lo ocupó Sangalli como único cambio con respecto al equipo que ganó en Vigo. Diego Martínez siguió con sus rotaciones e introdujo cinco cambios con respecto al once del jueves.

La Real entró mejor al partido con dos disparos y tres saques de esquina en los primeros siete minutos. Cuando el Granada empezaba a coger el pulso al partido, Oyarzabal demostró sus virtudes en defensa, al intuir y cortar un pase de Germán, y en ataque, con una calidad y un talento que le permitió dar un pase perfecto a Portu para que adelantara a su equipo.

Poco después se registró una jugadas que pudo ser clave porque Prieto Iglesias no quiso pitar como penalti una mano de Carlos Neva que cortaba la trayectoria del balón tras ver más de veinte veces la repetición.

Esa decisión dio vida al Granada, que a partir de ese momento se impuso y empató en un grave error de Remiro al no acertar a despejar una falta lanzada desde más de 35 metros por Vadillo que no ofrecía gran dificultad.

La Real mejoró en la segunda parte, en la que superó la presión del Granada, que bajó su intensidad, y tuvo más el control del juego y del partido, aunque sin crear ocasiones de gol. Apenas tuvo tres opciones de Monreal tras un buen pase de Mikel Merino, en la que buscó el pase cuando estaba en buena situación de disparo, en una falta lanzada por Oyarzabal que Le Normand no llegó a rematar y en un disparo del eibartarra que despejó Rui Silva. Fruto de esa mejoría y del último cambio llegó la victoria en la jugada de Januzaj que remató Portu.