Alvaro Reizabal
Abogado
JOPUNTUA

Puesta en escena

Entre el flujo de mensajes que nos llegan estos días, y que al menos nos hacen sonreír de vez en cuando, me llega uno que va en serio y es altamente significativo. Se trata de fotos de diferentes ruedas de prensa convocadas para dar la información sobre la pandemia. Aparece una de la OMS, otra de la Unión Europea, y otras cinco de diferentes países europeos: Alemania, Reino Unido, Italia, Francia y, por ultimo, España. El denominador común, salvo en la última, es que aparecen uno o más paisanos, todos vestidos de calle, alguno de ellos mandatario político y en todo caso algún científico experto en el tema. Como en esos chistes de «están un americano, un francés y un español»... la foto de la delegación española es la mejor. No podía ser de otra manera.

Y así, en esta aparecen tres militares, uno de ellos general de la Guardia Civil, de los del pecho lleno de medallas, que cada medallita tiene su correspondiente asignación económica, claro. Dos ministros: uno de ellos con muy mala vista para los casos de torturados que llegaban a su juzgado cuando era juez, y ahora titular de Interior, y como tal responsable de la Policía. Otra ministra, esta de Defensa y, emparentada por tanto en lo político con los militares, el ministro de Sanidad, y, por último, en segunda fila, medio escondido, el científico, único que sabe del tema y, que ha sufrido la enfermedad en sus propias carnes. Pero el decorado y la distribución espacial no dejan lugar a dudas de quién es quién en ese elenco. Parece el NODO dando cuenta gráfica de que al acto asistieron las autoridades civiles y militares.

Impresionante también el escenario normativo durante el estado de alarma: desde el primer momento, diarrea legislativa como forma de aparentar eficacia en la gobernanza del problema, que, indudablemente, es muy serio. Pero la improvisación al legislar es mala consejera, y al poco de cada norma, se publica otra de inferior rango normativo, diciendo que es para aclarar el contenido de la anterior, pero que con frecuencia la contradice frontalmente. Un esperpento.