Ane RUIZ DE OTXOA
LIBROS PARA LA CUARENTENA

Utopías miopes

Historiadores y antropólogos parecen estar de acuerdo en que en ese espacio conocido como China aparecieron inventos de importancia capital para la humanidad en su conjunto. De la pólvora a la brújula, de la imprenta al papel, China, unificada bajo una administración y un alfabeto propios, parecía estar abocada al liderazgo del planeta. Su decretado aislamiento acabó por momificarla aunque su estado de postración milenaria sufrió un terremoto tras la Revolución Comunista de 1949.

El autor, Frank Dikötter, catedrático en la Universidad de Hong Kong y profesor de Estudios Orientales en la Universidad de Londres, se centra en un periodo especialmente convulso en la historia reciente del gigante asiático.

Entre los años 1958-62, la China de Mao acometió dos proyectos faraónicos conocidos como “El Gran Salto Adelante” y la “Revolución Cultural”. En un contexto internacional de abierta competencia con la URSS por liderar el bloque comunista en el mundo China abordó cambios de producción y sociales como nunca antes se habían contemplado.

En apenas cinco años se buscó convertir pueblos en factorías, se llevaron a término canales y presas tratando de embridar corrientes tan formidables como el río Amarillo y se subvirtió el orden social que consideraba a profesores y ancianos como referentes en la sociedad.

Transcurrido el tiempo, ambos proyectos fueron abandonados al considerarlos las autoridades inviables. Aunque no sin que dejaran tras de sí una profunda e indeleble en la sociedad china.