Gloria Rekarte
Expresa
AZKEN PUNTUA

Antimonárquico

Sorprendida me tiene el furor antimonárquico de los últimos tiempos. Sorprendida de que después de asumir con complacencia una monarquía impuesta por un dictador, de aceptar por jefe del Estado a una persona que juró lealtad a los principios del Movimiento, de admitir que es inviolable, intocable e inimputable; de tenerlo por rey-rey durante 39 años y por rey emérito los que le queden, el motivo de escándalo sea el número de mujeres con las que se ha acostado, la máquina de contar dinero con la que pasaba tan buenos ratos, los maletines que le mandaban de Arabia Saudí o la caza de elefantes.

Sorprendida me tiene tanta indignación ahora. No puede ser que esperaran algo diferente cuando los despropósitos en torno a la figura de Juan Carlos de Borbón ha sido tantos que le aplaudían los monárquicos, por monárquicos, y los no monárquicos, por juancarlistas. Tan hondo ha llegado a calar la tontería.

Que no se quejen: tienen la monarquía que se merecen. El problema es que lo que muchos se merecen, lo sufrimos –y con nuestros impuestos lo pagamos–, todas y todos. Pero los escándalos de los Borbones, las amigas íntimas, las cuentas en Suiza, los coches de cientos de millones de euros, sólo son daños colaterales del error monumental de haber legitimado, con una monarquía, la herencia franquista. Que no se quejen.