Raimundo Fitero
DE REOJO

El paripé

Mientras escribo, siguen contestando preguntas Sánchez y Ayuso en la sede de la Presidencia de la Comunidad de Madrid, edifico de infausta memoria porque allí se torturó durante toda la dictadura y que está justo debajo del reloj de las campanadas y los cuartos. Pues bien, los analistas analizarán, pero desde una perspectiva de ciudadano atiborrado de experiencias, la pregunta ante este paripé es, ¿contra quién han hecho esa reunión y están dando esa imagen de bien avenidos? En primer lugar, contra la ciudadanía en pleno, porque estos actos de propaganda siempre sirven para ocultar las verdaderas intenciones.

Dejando este asunto en cuarentena, porque lo que dicen es que van a colocar policías, guardiaciviles y Ejército para blindar perfectamente las zonas declaradas desechables y controlar a sus habitantes, de clase trabajadora a base de mentiras y represión. No se han reunido para ampliar la contratación de personal sanitario, rastreadores, material para hacer los tests, no, lo importante es decir que si no cumples esas absurdas prohibiciones serás sancionado. Lo peor que se puede hacer en estas situaciones, pero ahí están ambos, haciendo el paripé.

Pero cuesta sacarse de la cabeza que esta reunión se celebra contra alguien. Porque no se puede pensar que Sánchez haya hecho un acto de mancharse con las insuficiencias políticas del trifachito en Madrid, avalando su pésima gestión, sino que al lograr esa unanimidad de bondad absoluta desarma al indocumentado Pablo Casado, que le va a ser mucho más difícil mantener esa estrategia de confrontación constante. El único acto público en dónde se llega a un supuesto acuerdo para el bien de todos, no aparece y su cabreo debe ser bastante profundo, pues nota que es prescindible hasta por aquellos que en teoría aupó.