Maite UBIRIA BEAUMONT
BAIONA

La Mancomunidad Vasca avala la movilización del 9 de enero

La Mancomunidad Vasca avaló ayer la moción defendida por su vicepresidenta, Renée Carrique, en nombre del ejecutivo de la institución, en la que se anima a acudir a la cadena humana en favor de los derechos de los presos el próximo 9 de enero en Baiona.

El consejo comunitario de la Mancomunidad Vasca celebró en la mañana de ayer en la Casa de las Asociaciones de Baiona la última sesión de este año.

Un pleno maratoniano, en el que se debatieron 60 puntos y en cuyo tramo final la vicepresidenta de la institución de Ipar Euskal Herria, la zuberotarra Renée Carrique, fue la encargada de defender una moción, aprobada por el ejecutivo, en la que se solicitaba a la asamblea su respaldo a la cadena humana que se celebrará el próximo 9 de enero a orillas del Aturri.

En el texto, se recuerda el camino «de paz y convivencia» elegido por la mayoría de la sociedad vasca y se remarca los logros conseguidos «gracias a la fuerte movilización de la sociedad civil y de los electos del territorio», desde la conferencia de Aiete hasta nuestros días, en la cuestión de los presos.

Entre esos avances, la moción señala la retirada del estatus de peligrosidad (DPS) a la mayoría de los vascos presos en cárceles hexagonales así como el acercamiento de la mayor parte de los miembros del colectivo a prisiones próximas a Euskal Herria.

Sin ocultar su preocupación por el rechazo sistemático a peticiones de liberación condicional o de excarcelación de presos enfermos, la moción adoptada por la Mancomunidad interpreta como un «signo de esperanza» la reciente excarcelación de Frédéric Xistor Haranburu, tras cumplir más de 30 años de encarcelamiento.

Otros dos presos, Ion Kepa Parot y Jakes Esnal, que han purgado también esa larga pena siguen esperando –al igual que Unai Parot, recluido en el Estado español– su excarcelación, según se recuerda en el texto.

Cara a seguir avanzando, en la moción se apela al Gobierno francés a «dejar de mostrarse indiferente frente a esa dinámica en marcha en Euskal Herria», la cual reúne a «una muestra muy amplia y diversa» de representantes electos y de la sociedad civil en la tarea de «construir una paz duradera».

La moción fue adoptada con 112 votos a favor, 15 en contra y 18 abstenciones. La decisión viene a revalidar el amplio consenso existente entre los electos de los 158 municipios representados en la primera institución de Ipar Euskal Herria que, desde su constitución en enero de 2017, ha mantenido un compromiso constante en favor de la paz.

Antorchas para iluminar el camino a casa

Una marcha entre Berriozar y la cárcel de Iruñea, durante la que los participantes portaron antorchas, reclamó en la tarde de ayer que las presas y los presos vascos sean trasladados a las prisiones más próximas a sus lugares de residencia «sin ninguna excepción ni condición».

La movilización, convocada por la red ciudadana Sare, reclamó asimismo la progresión de grado «a todos los presos», precisando que es algo que obedece a lo que «dice la ley ordinaria» y que está recogido entre «los pasos que necesariamente hay que dar para posibilitar el proceso de vuelta a casa de los y las presas». Según explicó, «la legislación de excepción aún vigente tiene bloqueado para los y las presas vascas ese proceso a desarrollar por toda persona» encarcelada, lo que supone imponer «una pena adicional no solo al propio preso, sino también a sus familiares».

Sare señaló que con esta movilización ha querido «iluminar ese camino a casa todavía oscuro» y recordar el llamamiento a la ciudadanía a participar en las movilizaciones que se realizarán pueblo a pueblo el próximo 9 de enero. GARA