Al menos cinco personas murieron el domingo por la noche en Colombia en una nueva «masacre». Los hechos ocurrieron en el municipio de Andes, en el departamento de Antioquia. El diputado Camilo Calle denunció que es la segunda que ocurre allí en lo que va de año; la anterior sucedió en febrero. «En ambas han perdido la vida cinco personas. Qué dolor y qué impotencia. Al Suroeste tenemos que acompañarlo y cuidarlo. ¡Tristeza!», lamentó en su cuenta de Twitter.

En el municipio de Sonsón, también en Antioquia, mataron a tres personas, una de ellas de 12 años. Esta sería la «mascare número 32» en lo que va de año, según el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz), que también informó de la muerte de un excombatiente de las FARC-EP. En este caso, un hombre que se trasladaba en una motocicleta disparó contra él causándole la muerte. Se trata del 271 firmante del acuerdo de paz que matan desde 2016.

La pasada semana, la ministra de Exteriores colombiana, Claudia Blum, dijo ante el Consejo de Seguridad de la ONU que «la existencia de disidencias de las FARC debe considerarse como un incumplimiento de la guerrilla, convertida ahora en partido político».

Estas declaraciones fueron contestadas por diferentes sectores. Quien fuera jefe negociador del Gobierno, Humberto de la Calle, advirtió de que esas afirmaciones «ponen en riesgo la vida de excombatientes que dejaron las armas. Es la negación del Acuerdo. Es una provocación. Exijo retractación».