El consejero de Economía y Hacienda del Gobierno de Lakua, Pedro Azpiazu, ha informado al Parlamento autonómico de que «el importe del remanente de tesorería disponible de la Comunidad Autónoma de Euskadi era, a 31 de diciembre de 2020, de 1.072.703.000 euros». Se trata de una respuesta a una solicitud del ya exparlamentario de EH Bildu Ander Rodríguez, y lo llamativo es que el Ejecutivo de Lakua «solicita» que el dato «no se publique en la página web» de la Cámara y el Legislativo ha seguido su recomendación.

A pesar de ello, aquí está la cifra de 1.073 millones de euros que en el primer año de la crisis sanitaria, económica y social provocada por el covid-19, ha ido acumulando en su «hucha» sin disponer de ellos.

El pasado 18 de marzo, este diario ya informó de que, en un primer avance de la liquidación presupuestaria, el remanente de tesorería a 31 de diciembre de 2020 era de 1.193 millones de euros. Hechos los ajustes pertinentes, tras nuevas liquidaciones, el remanente disponible se ha quedado en los referidos 1.073 millones.

Como se puede observar en el cuadro que figura en esta página, se trata del remanente disponible más elevado de toda la última década. En 2011, el remanente disponible fue de 143 millones; en 2012, de 26,8 millones, y en 2013, de 201,6 millones de euros. En 2017 se elevó a 588,9 millones; un año más tarde subió a 951,8 millones, para bajar en 2019 a 534,2 millones.

«Mucha emisión de deuda»

Desde fuentes oficiales del Departamento de Economía y Hacienda de Lakua, se justificó las grandes cantidades de dinero que sumaban en sus cuentas al hecho de que «durante 2020 se ha emitido toda la deuda posible para tener reservas ante las eventualidades que pueden surgir» en meses posteriores.

Estas mismas fuentes aseguraron que se trataba de una «gestión precavida para no tener problemas de liquidez» durante el ejercicio.

454 millones sin gastar

Y sí que parece evidente que el Gobierno de Lakua no ha tenido «problemas de liquidez», puesto que como informamos la pasada semana, el Ejecutivo gastó el año pasado 454 millones menos de lo presupuestado.

El Gabinete de Urkullu contó en 2020 de un presupuesto inicial de 11.774 millones de euros, pero con habilitaciones de nuevas cantidades, ampliaciones y la incorporación de remanentes acabó teniendo un presupuesto actualizado de 12.233 millones.

Sin embargo, según la liquidación provisional de 2020 presentada por el Ejecutivo autonómico, lo realmente gastado de toda esa cantidad fueron 11.779 millones de euros.

Esos 454 millones que el Gobierno de Lakua dejó de utilizar en el primer año de pandemia del covid suponen el 3,71% del presupuesto total. Por ejemplo, de 250 millones previstos para «inversiones reales» solo se emplearon 155. Esto muestra que se dejaron de invertir 95 millones, el 38% del presupuesto.

Otro ejemplo es que el Departamento de Turismo, Comercio y Consumo, que contaba con un presupuesto actualizado de 99 millones de euros, empleó 68,5. La Consejería de la que depende, por ejemplo, la hostelería, dejó sin gastar 30 millones de euros, lo que suma el 30,8% de todo su montante.

Sin usar el 11% del fondo covid

Según los datos aportados en estas páginas, no es solo que el Ejecutivo no utilizara todo su presupuesto, sino que también dejó de gastar el 11% del fondo especial para medidas contra la crisis provocada por el covid-19 creado en marzo de 2020.

La liquidación remitida al Parlamento refleja que los 470,7 millones de euros que sumó la partida 1229 para el covid, no se llegaron a emplear 51,6 millones de euros, lo que supone exactamente el 10,966%.