Desesperación en Haití por la lentitud en la entrega de la ayuda humanitaria

La lentitud en la entrega de la ayuda a los damnificados y el colapso hospitalario en Haití, cuando todavía se trabaja para recuperar cadáveres entre los escombros dejados hace una semana por un potente terremoto, ya que hay varios cientos de desaparecidos, está causando desesperación y aumen- tando la tensión en el país.

Las protestas de los supervivientes se suceden para reclamar asistencia tras siete días viviendo a la intemperie a consecuencia del sismo de 7,2 de magnitud que dejó al menos 2.189 víctimas mortales y casi 12.000 heridos en el país, castigado cuatro días después por la tormenta tropical Grace.

Los damnificados carecen de agua potable y alimentos y piden también lonas y tiendas de campaña para refugiarse.

Una de las primeras entregas de alimentos por parte de las autoridades locales fueron un par de docenas de cajas de arroz y kits de comida empaquetada que llegaron a una zona de improvisadas tiendas de campaña en una de las áreas más pobres de Les Cayes, donde la mayor parte de viviendas con tejado de hojalata fueron arrasadas por el sismo.

La asistencia es muy escasa y difícil de distribuir, según admitieron las autoridades.

El primer ministro, Ariel Henry, advirtió de que Haití se enfrenta a «tiempos dolorosos» y que el país «está destruido física y mentalmente». Aseguró que su Ejecutivo trabajará para «no repetir la historia de la mala gestión y coordinación de la ayuda», una clara referencia al caos que siguió al devastador terremoto de 2010, cuando el Gobierno fue acusado de no hacer llegar a quienes lo necesitaban todo el dinero recaudado por los donantes internacionales.