EIBAR 3

IBIZA 1

Un objetivo y dos retos se marcaba el Eibar en su retorno a Ipurua. Reencontrarse con la victoria, acabando con la imbatibilidad del Ibiza y recuperando su mejor nivel tras haberlo pasado mal en muchos tramos del derbi de Lezama. Consiguió los dos primeros, que evidentemente iban de la mano, pero no tanto el tercero, en un partido en el que su rival demostró que su situación en la tabla no es fruto de la casualidad. Fue mejor en la primera parte y sólo a ratos de la segunda se vio superior al equipo local.

Pero el Eibar reaccionó a tiempo para meterse en el partido y supo matarlo cuando se encontró con la oportunidad. Eso le permite enlazar su sexta jornada consecutiva en positivo y meterse de nuevo en el grupo de cabeza, a sólo tres puntos del líder, aunque como sucedió la semana pasada, su juego dejó algunas sombras.

Saltó al césped con dos novedades en la formación inicial. Venancio envió a Burgos al banquillo y Toño se quedó incluso fuera de la lista por una lesión en el sóleo derecho, propiciando la titularidad de Rahmani. Se notó para mal, con el sestaotarra casi desaparecido y un Glauder que, menos protegido de lo habitual, sufrió con las entradas del Ibiza por banda. No fueron pocas, sobre todo en un primer tiempo de dominio del Ibiza, que movió bien el balón y generó peligro en el área de un Eibar incómodo y con menos intensidad de la necesaria. No fue una sorpresa que llegara el 0-1.

Le costó reaccionar al Eibar ante un rival que seguía mandón e incluso amagó con aumentar su ventaja. Pero, en su primera buena jugada colectiva de ataque, los guipuzcoanos empataron. Etxeita, Javi Muñoz y Correa tocaron antes de que Fran Sol se hiciera hueco entre tres rivales y cruzara el 1-1, estrenándose de paso como goleador con la camiseta azulgrana.

El marcador mejoraba pero la pinta del partido no, así que Gaizka Garitano movió ficha en el descanso. El Eibar regresó con Sergio por Rahmani y Expósito más adelantado. Y junto al capitán, como es habitual, también el equipo dio un paso adelante. Llegaron sus mejores minutos y también el gol, con un centro de Fran Sol que remató ajustado al palo Expósito y dio en Parreño antes de entrar.

Se resistió el Ibiza, que volvió a echarse arriba y generar cierta inquietud. Pero también dejó más huecos en la retaguardia y los guipuzcoanos lo aprovecharon para sentenciar con una contra servida por Expósito para que Stoichkov regateara la salida del guardameta Parreño y anotara el definitivo 3-1.