El buen inicio del Baskonia se transforma en la peor paliza

Los gasteiztarras ganaban por 21-30, pero encajaron un parcial de 24-0 antes del receso y otro decisivo del 16-0 en el tercer cuarto.

ZENIT SAN PETERS. 83

BITCI BASKONIA 54

«Hemos empezado bien, pero después, en el segundo cuarto, nos hemos parado. Y cuando el Zenit de San Petersburgo se ha puesto por delante, nos hemos venido abajo y no hemos sabido volver al partido». Son palabras de Dusko Ivanovic, después de que Bitci Baskonia recibiera ayer en San Petersburgo la peor paliza de lo que llevamos de campaña. Una paliza que nadie hubiera imaginado cuando Steven Enoch elevó el 21-30.

La canasta de Enoch cerraba un parcial de 0-7 nada más comenzar el segundo cuarto, luego de un primer asalto en el que, de no haber sido por Jordan Loyd, la renta gasteiztarra hubiera sido mayor.

Pero algo pasó. Saski Baskonia de pronto gripó, quizá porque en ese momento Granger estaba descansando. La frescura y la movilidad de los primeros 14 minutos desapareció, dando paso a un juego sin ideas. Además, el cuadro local pasó de firmar un 2 de 12 en triples, a anotar 6 de sus 8 intentos siguientes desde la larga distancia.

Jordan Mickey puso por delante a los de Xavi Pascual y el Zenit no miró para atrás. Lo que en el 32-30 era un parcial de 11-0 acabó siendo un 24-0 en tiempo de descanso: 45-30 y perplejidad e impotencia en el delicado panorama baskonista.

Triples de hielo

Lo más seguro es que hubiera arenga por parte de Dusko Ivanovic a sus jugadores, porque los dos primeros minutos del tercer cuarto fueron buenos. Un «dos más uno» de Baldwin a la contra suponían un 49-37 que, aunque no ocultaba la dificultad de la empresa, ponía el acento en que los gasteiztarras iban a intentar volver al partido.

No fue así, empero. Jordan Mickey, Kulagin y Billy Baron encadenaron un 9-0 que helaron por completo a los gasteiztarras, al tiempo que Dusko Ivanovic tuvo que pedir tiempo muerto con 58-37.

Sin embargo, sus pupilos no se volverían a levantar, ya que este tercer cuarto acabaría con 65-37, es decir, que el Zenit logró cerrar el partido con un parcial de 16-0, dejando en el horizonte la sensación de que los de Xavi Pascual no iban a dejarse llevar, tal y como hiciera el Unics Kazan el miércoles.

El Zenit tiene ahora un balance de 4-3, por 3-4 del Baskonia; es decir, que se tomaron el último cuarto, pese a dar descanso a sus mejores jugadores, con la seriedad que precisa enfrentarse a un rival de su nivel. Los de Ivanovic, completamente idos del partido –la diferencia en el rebote fue escandalosa, 52 a 27, así como la de valoración: 109 a 45–, bastante hicieron con impedir que la diferencia final superase los 30 puntos.

No queda otra que volver a casa, limpiar la mente tras este nuevo desastre y preparar el duelo de ya mañana por la ante el Real Madrid –que cayó por 65-58 ante el Unics Kazan, en un día horroroso de los de Pablo Laso–, ya veremos si con Giedraitis o sin él. Ojalá la pesadilla de esta gira por Rusia se acabe fuera de sus fronteras.

Araski busca un triunfo antes del parón liguero

La Liga Femenina Endesa se va a parar en la primera quincena de noviembre a cuenta de la clasificatoria del Eurobasket Femenino de 2023. Antes de ese parón, Kutxabank Araski afronta esta tarde a las 18.00 su último partido en Mendizorrotza, frente a Tenerife.

Las de Madelen Urieta llegan con un balance de 3-3, luego de caer por 74-58 en su visita a Gran Canaria. Su rival acude a la cita gasteiztarra con un triunfo menos y tras haber perdido a Paola Ferrari, recién fichada por el Ensino. En su lugar, las tinerfeñas han fichado a la alero Megan Walker –subcampeona de la WNBA con Phoenix– y la argentina Macarena Rosset. A. G.