Macron y Orban subrayan sus alianzas y eluden las disputas con la UE

Viktor Orban y Emmanuel Macron, que asumirá la Presidencia del Consejo de la UE, eludieron las disputas con Budapest para reconocerse como «oponentes políticos pero socios».

El presidente francés, Emmanuel Macron y el primer ministro húngaro, Viktor Orban, prefirieron destacar un buen entendimiento ayer en Budapest por encima de diferencias políticas reconociéndose mutuamente, con los mismos términos, como «oponentes políticos pero socios europeos».

Ambos subrayaron su alianza en temas como la defensa nuclear o europea, incluidos el programa de la presidencia francesa de la UE. «Tenemos desencuentros políticos que se conocen, pero tenemos la voluntad de trabajar juntos por Europa y ser socios leales», declaró Macron, tras intercambiar un caluroso apretón de manos con su interlocutor y sin detenerse en los temas espinosos.

«Adversarios políticos y socios europeos al mismo tiempo: aceptamos la definición de Francia, patria de los enciclopedistas», coincidió Orban, evocando «una relación marcada por el respeto».

Macron también agradeció a Hungría su participación en la agrupación europea de fuerzas especiales Takuba en el Sahel, iniciada por París «para luchar contra el terrorismo

La primera de un jefe de Estado francés a Hungría desde 2007, tiene lugar en el marco de una cumbre de los países del grupo de Visegrado (Hungría, Polonia, República Checa, Eslovaquia) y con ella Macron completa su gira por las capitales de la UE. Por su parte, Orban, anfitrión de la ultraderecha europea, subraya el peso de Hungría en la UE pese a las constantes disputas. Así, en cuanto a la cuestión del estado de derecho, que enfrenta a Orban y la UE, Macron se contentó con prometer «debates interesantes», al tiempo que invocaba «la necesidad de respetar cada uno de los estados miembros» y eludía el tema de los derechos de la comunidad LGBTI+.

Bruselas sanciona al grupo Wagner

Los ministros de Exteriores de la UE aprobaron sancionar a la compañía de mercenarios rusa Wagner, presente en países africanos, así como a otras 8 personas y 3 entidades vinculadas, subrayando que el grupo «ha reclutado, capacitado y enviado operativos militares privados a zonas de conflicto en todo el mundo para alimentar la violencia, saquear recursos naturales e intimidar a civiles en violación del derecho internacional, incluido el de derechos humanos». GARA