Con horario de prime-time televisivo, el Parejas de remonte de Oriamendi reparte mañana sus txapelas, título que Urriza-Labaka ya consiguieron el año pasado y que pretenden defender ante unos Imanol Ansa y Martirena que se impusieron en la liguilla previa. Es una final por parejas pero las miradas estarán centradas en los dos delanteros, los dos mejores del cuadro, que tendrán que llevar el peso de sus parejas. Además de la txapela, Javi Urriza defenderá su estatus ante un Ansa II cada vez más cerca de su nuca.

«Para mí es positivo tener delante a un pelotari como él, que me ayuda a superarme y a mejorar. Si en este campeonato he ofrecido un nivel alto es gracias a él. Tengo mucha ilusión y creo que llegamos muy bien preparados. Creo en la victoria y espero que se produzca», señaló el urnietarra, que tiene ganas de dar el sorpasso.

Javi Urriza se ha impuesto en las últimas finales en las que se hn enfrentado, pero no cree que eso tenga ninguna influencia mañana. «Eso es simple estadística. Desde luego que va para arriba y a mí me quedan cuatro telediarios. Durante las finales hemos dado buen nivel y ellos en la liguilla y a lo largo del campeonato han demostrado ser los mejores. En la liguilla nos dieron un buen repaso, así que vamos a intentar cambiar las tornas y habrá que dar el máximo nivel para meterles mano. En el partido de la liguilla nos arrollaron, fueron muy superiores a nosotros. Eso sí, fue al inicio de la liguilla, hemos ido de menos a más y las sensaciones son muy buenas», apuntó.

Ilusión del debutante

Ibai Martirena disputará su primera final del Parejas. «Hasta entrar en juego y empezar a sudar es posible que esté algo nervioso. Una vez que entremos en juego habrá que hacerlo lo mejor posible».

El azpeitiarra Jagoba Labaka vuelve a la final y para jugarla eligieron pelotas algo más secas. «Andan más por debajo y las de ellos son más ligeras, de más vuelo». Es consciente que los rivales tratarán de cargarle el juego. «Lo intentarán pero para eso deberán superar a Urriza y está ahí. Lo tengo asumido, en todo el torneo Urriza es la referencia y todos utilizan la misma táctica. Yo trataré de aguantar y ayudar lo máximo posible a Javi. Hacer buena será mi objetivo».

El azpeitiarra es cada vez un remontista más experimentado. «Ganar la txapela del año pasado me otorgó un poso y una tranquilidad como remontista. Tengo más confianza y los nervios no serán ninguna excusa».