Arnaitz GORRITI
BALONCESTO - EUROLIGA

Condenado por sus propios errores

Saski Baskonia cae ante Olympiacos en un partido gris por culpa de sus pérdidas de balón y la veteranía de los jugadores helenos.

BITCI BASKONIA 62

OLYMPIACOS 72


Con 16 pérdidas, y un parcial de 2-12 en los últimos tres minutos y medio, Bitci Baskonia sumó anoche su quinta derrota consecutiva en la Euroliga. Ante un Olympiacos muy gris, a los del Pireo les bastó con tirar de experiencia y buscar los puntos de Tyler Dorsey y Vezenkov en los minutos de la verdad.

El choque tuvo un ritmo y una anotación dignas del basket europeo de los años 90, algo que no es para nada un piropo, y que jugadores como Baldwin sufrieron en sus carnes.

Olympiacos hizo valer el tamaño y la intimidación de Moustapha Fall para tomar ventaja en el primer cuarto y solo cuando descansó el gigante francés pudo tomar algo de aire el cuadro gasteiztarra.

No le acompañó el acierto pese a mover bastante bien el balón –cuando no perdía la bola, aunque su rival compartió defecto–, y consiguió nivelar el partido. No obstante, el duelo llegó con una exigua renta helena después de que los gasteiztarras se toparan con una versión acertada del veterano Kostas Sloukas: 29-32.

La segunda mitad fue un toma y daca en el que ni Olympiacos se terminó de ir, ni Saski Baskonia terminó de remontar. La entrada de Lamar Peters y Kurucs le dio mucha intensidad defensiva, y aunque las lagunas defensivas gasteiztarras permitían a Olympiacos mantenerse en cabeza, el arranque del último asalto trajo consigo un parcial de 9-0, con triples de Giedraitis y Baldwin para adelantar por última vez a los de Neven Spahija: 53-30.

Pero Olympiacos se aferró al partido y a partir del empate a 60, ya dentro de la recta final del choque, el cuadro del Pireo supo hacer valer sus virtudes, al tiempo que el Baskonia se diluía por sus propios errores.

Derrota de Kutxabank Araski

Kutxabank Araski jugó en Mendizorrotza su último partido de la primera vuelta de la Liga Femenina Endesa. Las de Madelen Urieta, golpeadas por la covid-19 y la ausencia de Christinaki, solo pudieron competir con siete efectivos ante un Valencia Basket que se impuso por 65-86.

La escuadra taronja hizo valer su gran arranque, con un 11-27 que supuso el colchón en el grueso de un partido mucho más competido que lo que indica el marcador final.

Las locales lo dieron todo mientras les duró el fuelle, pero una vez que el marcador se puso con 56-66 en el arranque del último período, las visitantes rompieron el partido de la mano de Bec Allen. La australiana, con 15 puntos, remató a las gasteiztarras con sus triples.