REAL MADRID 3

ALAVÉS 0

Asensio, con un disparo potente en el minuto 62, terminó encarrilando la victoria del Real Madrid sobre un Alavés que plantó cara al líder de la competición. Un minuto antes, el atacante mallorquín cometió un grave error que no fue aprovechado por Pere Pons, que recién ingresado al verde se vio en una situación inesperada, en un cara a cara con Courtois que no pudo finalizar de forma brillante. El disparo del catalán, después de regatear al guardameta, se marchó fuera, justo al contrario que el chut de Asensio minutos después. El mallorquín se deshizo del error y le negó al Alavés un punto que le habría venido de maravilla para la confianza.

Falto de confianza también andaba la escuadra dirigida por Ancelotti después de la derrota en París y el empate liguero frente al Villarreal. En los últimos 52 disparos solo había metido un gol, una estadística muy lejana al Real Madrid del inicio de temporada. Benzema, que volvió en París después de unas semanas lesionado, estuvo alejado de la zona de remate y la chispa de Vinicius está un poco desgastada. A pesar de todo, ambos jugadores marcaron sendos goles: el joven brasileño, en el minuto 79 tras finalizar una buena jugada colectiva, y el francés, de penalti, ya en el tiempo añadido.

Buenas sensaciones

El Alavés de Mendilibar plantó cara de manera muy digna durante la primera hora de juego, incluso gozó de más ocasiones y más claras. Pacheco apenas tuvo que intervenir en dos disparos que tuvo que atajar en dos tiempos –un disparo de falta de Alaba le hizo un extraño pero el extremeño estuvo atento para salvar–. Antes de esa ocasión, la primera de la segunda mitad, los albiazules fueron capaces de llegar con peligro al área merengue, en parte por la falta de contundencia de los blancos. En la primera mitad, Duarte estuvo rápido para robar el balón a Casemiro y Jason, dentro del área, envió alto su disparo. Fue la primera ocasión clara del partido y fue un tirón de orejas para el conjunto local.

Parece que Jason se ha instalado definitivamente en esa banda derecha en el esquema de Mendilibar y en la izquierda, ya nadie duda de la capacidad de desborde de Luis Rioja. El almeriense gozó de una buena ocasión tras coger la espalda de Carvajal pero no estuvo acertado ante el guardameta belga.

El único cambio en el once de Ancelotti respecto a París fue la entrada de Fede Valverde por Toni Kroos y la ausencia del alemán fue notoria en la primera mitad. Y si no, que se lo digan a Luka Modric, que tardó toda una primera mitad hasta sentirse cómodo en el verde. Una vez que el ‘10’ empezó a mandar en la circulación del balón, comenzaron a llegar las ocasiones de los locales, pero aún sin conseguir achantar al Alavés –solo los goles afectaron a los de Mendilibar–. Una doble ocasión de Karim Benzema y Vinicius Junior –Lejeune sacó el balón desde la misma línea de gol– tuvo como respuesta otro desmarque de Rioja que no pudo encontrar puerta después del mano a mano con Courtois.

Si el mano a mano errado por el atacante almeriense fue una lástima, lo fallado por Pere Pons no tiene nombre y menos aún cuando en la próxima jugada llega el 1-0 en un disparo lejano de Asensio, que está en estado de gracia. Fue clave en la victoria de Granada y volvió a serlo ante el Alavés. El Glorioso generó más que nunca en un escenario complicado –y esta puede ser la nota más positiva del partido– pero si perdonas una tras otra, lo terminas pagando.