La ofensiva los deja sin poder jugar

El duelo entre Bitci Baskonia y Unics Kazan, entreZenit y Barça o entre Bayern de Múnich y el CSKAde Moscú de la Euroliga, quedaron suspendidos por el Artículo 151 de la «Euroleague Regulations».

Esta página debía dar cuenta del encuentro de Euroliga entre Bitci Baskonia y el Unics Kazan que entrena Velimir Perasovic. Pero la ofensiva rusa en suelo ucranio desbarató que se disputara este partido, así como el que debían jugar ayer el Bayern de Múnich frente al CSKA de Moscú y el que debía enfrentar hoy al Barça contra el Zenit en San Petersburgo.

Estos duelos quedaron suspendidos como «medida preventiva» en virtud del Artículo 151 de la Euroleague Regulations, aunque en principio, la máxima competición europea comunicaba que continuaría con «el calendario de competición previsto», mientras no peligrase la integridad de los equipos participantes o que se produjeran «decisiones gubernamentales que impidan la celebración de algún partido en circunstancias normales».

Al final, y para evitar mayores descoordinaciones, la Euroliga anunció una reunión «entre los 18 clubes participantes» para hoy, con el objeto de «analizar el curso de los acontecimientos y tomar, si fuera necesario, las medidas correspondientes».

Onda expansiva

La onda expansiva a raíz de la ofensiva en Ucrania está siendo morrocotuda a nivel continental. Ayer, conforme pasaban las horas, nuevas disciplinas, clubes o protagonistas reaccionaban en vista de la realidad, de forma que quedaba claro por enésima vez que el sonsonete «no hay que mezclar política y deporte» es pura y simple mentira.

El partido de las Ventanas FIBA jugado con toda normalidad entre Rusia y Países Bajos casi fue la excepción, mientras que por contra, la UEFA y la FIFA condenaban enérgicamente la ofensiva militar rusa en Ucrania y aseguraban que está «tratando la situación con la máxima seriedad y urgencia».

Asimismo, la UEFA afirmó que tomará decisiones que anunciará hoy sobre la sede de la final de la Liga de Campeones, que está prevista para el 28 de mayo en San Petersburgo, cuyo estadio lleva el nombre del gigante gasista ruso Gazprom, uno de los principales patrocinadores de la UEFA desde 2012.

Precisamente, el club alemán Schalke 04 decidía quitar de sus camisetas el nombre de Gazprom, su principal patrocinador, mientras que el representante de la empresa rusa dimitía de sus funciones en el Consejo de Vigilancia.

Moscú también debe albergar la semifinal de los play-offs del Mundial 2022 entre Rusia y Polonia el 24 de marzo, o incluso la final el 29 de marzo, si la «Rodina» vence a Polonia. Así, las federaciones polaca, sueca y checa solicitaban la reubicación de estos citados play-offs. Estas federaciones «no tienen previsto viajar a Rusia» los días 24 y 29 de marzo para disputar su billete para el Mundial y pedían a la FIFA y la UEFA, organizadoras, que «reaccionen de inmediato y presenten alternativas de solución» respecto al lugar de encuentro. Gianni Infantino, presidente de la FIFA, aseguró que su organización sigue de cerca los sucesos y apeló al «diálogo constructivo» y que está a la espera de la evolución del conflicto para tomar decisiones.

Por otro lado, el ministro polaco de Deportes también sugirió este martes retirar de Rusia la organización del Campeonato Mundial de Voleibol Masculino, que comienza el 26 de agosto.

Panorama en Euskal Herria

Aparte de la suspensión del partido del Buesa Arena, en Euskal Herria se hizo notar la convulsión de los sucesos en Ucrania. El encuentro de boxeo y kickboxing entre Euskadi y Ucrania que se iba a celebrar el 26 de marzo en el Bilbao Arena quedó cancelado «por el grave conflicto bélico tras el ataque militar de Rusia a Ucrania», según confirmó la Unión de Federaciones Deportivas Vascas (UFDV).

Tras esta forzosa cancelación, los organizadores de esta función que cuenta con el respaldo de la UFDV, el Gobierno de Lakua, las federaciones Vasca y Vizcaina, la Diputación de Bizkaia y el Ayuntamiento de Bilbo, «buscan contrarreloj otro rival» en esa misma fecha y escenario.